Estudiantes ganó por... galones. Fue entrar Azofra y resolver por la vía del cloroformo -es decir, por K.O.- un partido enredado en el que el Lagun Aro Bilbao perdonó con 70-73 a favor a un minuto para el final. Un triple contra tabla de Loncar hizo la luz y forzó la prórroga. Y en ella, Estudiantes resolvió con éxito la ecuación del base (sigue valiendo el Miso+Rodríguez=Azofra) y sumó una victoria que le devuelve al tren de la Liga.

Andrés brilló de escolta y de base y Sergio apuntó el talento que le hará grande, pero fue Nacho quien sentenció un partido en el que es de justicia destacar a Jiménez. Carlitos ya es Don Carlos y la estadística así lo dice. Fue el MVP de la semana pasada y ayer, a 5:30 para el descanso, ya sumaba 11 puntos y 11 rebotes. Su estadística final habría sido asombrosa de no mediar un golpe en el hombro que le impidió rematar la faena.

Scott, líder anotador.

Él fue el peor enemigo para un Lagun Aro que gustó en Vistalegre. Pocos dirían que es un recién ascendido. Scott (máximo anotador con 24 puntos) y Sanmartín lideraron a los de Vidorreta, que en el arranque llegaron a dominar por 7 puntos (9-17) y al descanso perdían por cuatro (45-41). Un triple de Savovic les devolvió el mando (48-49); otro más del serbio les metió de nuevo en el partido (70-70). A partir de ahí, la historia ya la saben. Prórroga y en ella, dos triples de Iturbe y Azofra para sentenciar. El grito de Nachocho volvió a Vistalegre. Y eso que está con un hombro menos.