Joan Laporta, presidente del Barcelona, escenificó el cisma que se vive en el baloncesto del club en una comparecencia compartida con el directivo responsable de la sección, Joseph Maria Bartomeu, quien reabrió durante la presentación de Manolo Flores como nuevo técnico del equipo el enfrentamiento que se produjo en el seno de la junta a inicios de temporada.
Josep Maria Bartomeu reclamó la palabra apenas iniciada la conferencia de presentación de Manolo Flores para descargar de culpas a los jugadores y entrenadores y ponerlas a espaldas de la directiva. "En septiembre modificamos una estructura que funcionaba bien el nombramiento de Valero Rivera conllevó por petición suya la destitución como secretario técnico de la sección de Antonio Maceiras y, como consecuencia, la dimisión del técnico Svetislav Pesic- y hay que aprender de los errores para que no se repitan en el futuro", manifestó.
El responsable del baloncesto azulgrana se mostró implacable en su discurso y añadió que hay "una máxima que dice que lo que funciona bien no hay que tocarlo, pero se hizo y hay que reconocer la culpa". Joan Laporta tuvo que reaccionar, inquirido por los informadores sobre si compartía ese criterio, y subrayó que "la junta siempre es responsable de lo que sucede en el club en último término, pero lo mejor es analizar las cosas a final de temporada, porque el equipo está inmerso todavía en la Euroliga y con las posibilidades intactas en la Liga ACB".
En cualquier caso, Laporta consideró que es "lícito y loable que se hagan ejercicios de responsabilidad", en referencia a las manifestaciones de Josep Maria Bartomeu, pero apuntó también a las dimisiones de Pesic, Valero Rivera y, este fin de semana, del técnico Joan Montes, como razones del mal funcionamiento del baloncesto azulgrana.
Sin contacto
Bartomeu lanzó otra piedra contra su presidente cuando deslizó que no pudo contactar con él estos días pese a la difícil situación del equipo, cuyo último capítulo fue la marcha de Montes. Joan Laporta explicó sin embargo que se habían reunido hace una semana y que habían acordado "por consenso" con Manolo Flores el nombramiento de éste en caso de producirse la previsible dimisión del entonces técnico de la plantilla. Laporta se resistió, pero admitió que el nombre de Javier Imbroda pudo formar parte de las opciones que se barajaron para suplir a Joan Montes.
Josep Maria Bartomeu tuvo una última discrepancia con Laporta cuando aseguró que los responsables del baloncesto nunca habían contemplado la temporada actual como de transición y subrayó que es un "luchador" que no se rendirá, que todavía tiene cosas que aportar al club y que acata las decisiones de la mayoría de la junta, aunque algunas no las comparta, por lo que no se plantea su dimisión.
