España no tiene sitio aún para entrenarse en Pekín

Pekín 2008 | Baloncesto

España no tiene sitio aún para entrenarse en Pekín

España no tiene sitio aún para entrenarse en Pekín

biel aliño

Llega el día 5 a la Villa Olímpica procedente de Shanghai

Imparable como está en la cancha, España ha encontrado un inesperado problema en la logística. La Selección no tiene, a cinco días de aterrizar en Pekín, ninguna cancha en la que entrenarse. La delegación española que encabeza Juan Martín Caño, jefe de equipo, se afana a estas horas por encontrar en algún rincón de Pekín una cancha que cumpla los mínimos para trabajar antes del debut del día 10 ante Grecia. El asunto se ha ido complicando por días. La idea inicial de la Selección era aterrizar en Shanghai el 4 de agosto y permanecer tres días en la capital económica de China. Pero Shanghai es sede olímpica y, aunque sólo acoja fútbol, tiene ocupadas sus instalaciones. El plan B fue Nanjing, sede estos días de la Diamond Ball que organiza la FIBA y en la que participa Argentina. Cercana a Shanghai, era una buena posibilidad para trabajar tres días porque además, el pabellón de la Diamond ya estaba libre. Al final, la opción también fue abortada. Se decidió, entonces, que Shanghai apenas sería una escala y que el día 5 de agosto la Selección se marcharía rumbo a Pekín.

España no jugará más hasta su debut oficial ante Grecia. "Eso no es un problema especial. El problema es que, por las dificultades organizativas, se nos están presentando inconvenientes. Lo que necesitamos es entrenarnos, y entrenarnos bien", pidió Aíto García Reneses en la sala de prensa del Ciutat de Castelló el miércoles por la noche. Además, todavía no se ha descartado organizar un partido a puerta cerrada contra alguno de los equipos que ya estén en Pekín. Tampoco parece fácil.

Li-Ning, la firma china que viste a la Selección de baloncesto (y toda la ropa de paseo de la delegación española en los Juegos) intenta articular soluciones con urgencia. La Selección vuela el domingo a las 7:00 horas rumbo a Londres, desde donde enlazará para llegar a Shanghai. Para entonces, espera tener resuelto un asunto que trae de cabeza a Aíto, amante del método y técnico con estilo que no soportaría no hacer cancha ningún día. Después de dos semanas de entrenamiento intensivo en San Fernando y una gira más activa todavía, sería un retroceso.