Aunque los interesados guardan por ahora silencio, está claro que está semana será clave para el futuro de Ricky Rubio. La situación se puede desbloquear en los próximos días, aunque Jordi Villacampa, presidente del Joventut se mantiene firme en que para negociar es imprescindible que el jugador retire la demanda que ha interpuesto contra el club badalonés.
A partir de ahí Villacampa ha asegurado: "Escucharemos todas las ofertas vengan de donde vengan". De esta manera deberá considerar la que le ofrecieron los representantes del jugador, superior a los tres millones de dólares, por la cláusula de rescisión -actualmente de 5,75 millones de euros- con el compromiso de jugar exclusivamente en la NBA.
Esta cantidad representaría el salario de un año del jugador en la NBA después de ser elegido con el número 5 en la primera ronda del draft por los Minnesota Timberwolves, equipo que podría traspasarlo a los New York Knicks en una operación que está cerrando Dan Fegan, su agente estadounidense, con la franquicia de Minneapolis.
Pero no hay que olvidar que Ricky tiene aún dos años de contrato con el Joventut y el único que puede negociar con otros clubes es el badalonés. A día de hoy Real Madrid y Unicaja parecen ser los dos únicos clubes de la ACB que están interesados en sus servicios, siempre que la cláusula sea rebajada, porque nadie pagará 5,75 millones por su libertad.
