Del Olimpo al purgatorio en 48 horas. Era imposible subir más arriba, cierto, ganar al campeón de Europa en su propia casa da pedigrí, pero el Real Madrid se reencontró de sopetón con la cruda realidad, con la dureza de la ACB, única liga que tiene asegurados cuatro equipos en el Top-16 de la Euroliga. El Baskonia reivindicó con el recital su candidatura al título. Sigue el debate abierto entre Barcelona y Madrid, sí, pero a los demás no hay que bajarles el micrófono. Y el Baskonia es capaz de firmar recitales como el de ayer sin sus dos fichajes estrella para esta 09-10: Herrmann y Oleson. Un diez para Ivanovic.
La superioridad vitoriana fue evidente, Messina fue el primero en reconocerlo. Y zanjó con una sola frase cualquier excusa por el ajetreado viaje desde Grecia (retraso en el vuelo, trayecto Atenas-Madrid, avión a Bilbao y de ahí por carretera a Vitoria; llegada al hotel a las 2:30 de la madrugada). "Somos jóvenes, yo incluso. Si nos hemos cansado por esto, mejor cambiamos de trabajo". Messina dixit.
Lo único que pudo intentar cambiar fue la mentalidad de sus jugadores en el último cuarto, que afrontaron 18 puntos abajo (62-44). Ya era tarde para tutear a un Baskonia superior en todo. Desde los bases, por número (dos contra uno) y fuelle (Singletary y Huertas cansaron a Prigioni), hasta los pívots, donde Splitter y Barac bailaron con zancos (32 rebotes a 18). Reyes sigue sin ser Reyes tras la lesión y Van den Spiegel no aparece. Y a Llull Corazón de León se le echa en falta.
Triples.
Huertas firmó el 20-10 y a partir de ahí el partido voló sobre los diez puntos de margen. Cuando Bullock puso fin a la ceguera blanca en el triple (0/7), la cuesta ya era hacia arriba. Más aún cuando en el tercer cuarto, el Baskonia recibió al Madrid con un 12-0 (45-28). Cinco minutos estuvieron los blancos sin anotar, lo que abrió el apetito de Ribas o Teletovic y cerró el partido. El Baskonia reclama voz y voto en esta Liga y el Madrid, mientras, agradece el parón de la Euroliga para rearmarse. Que el próximo domingo llega el Barça.
