Trece años en la NBA, once de ellos en Dallas, y no pudo arrimarse al anillo. ¿Sintió envidia cuando lo lograron Nowitzki y compañía?

Sí, pero va a ser difícil repetirlo. Ha sido clave ser consistentes durante toda la temporada y tener un punto de suerte.

En principio, un español, Rudy Fernández, estará con su equipo cuando acabe el lockout.

Debido al lockout, los empleados de las franquicias no podemos hablar sobre jugadores. Lo que sí puedo decir es que ¡queremos a Rudy! Tiene capacidad para hacer tantas cosas: tirar, defender, es atlético... Sabemos que puede jugar con nosotros. Por tanto, ¡por favor, Rudy, ven a jugar a los Mavericks! (risas).

¿En su época estaba más caro el anillo?

En los 80 tuvimos un gran equipo con Aguirre, Harper, Perkins... pero delante siempre estaban los Lakers. Nuestro reto era destronarles y nunca lo pudimos conseguir. Eran fantásticos, inaccesibles. Era muy complicado medirte a un base de 2,05 como Magic... y cuando veías correr en transición a Worthy con Scott en el perímetro, a rezar. Si las cosas no funcionaban, ahí tenían a su gran capitán, Kareem, con su invento del sky hook.

¿Usted se sintió infravalorado entre tanta estrella?

No lo veo así. Estuve en la selección olímpica para Moscú 80, pero al final hubo boicot. Fui cuatro veces all-star y un gran tirador en la mejor era de la NBA.

Por entonces no era muy habitual que estrellas como usted recalaran en Europa.

A mediados de los 90 vine al AEK Atenas y al Stefanel Milán de Fucka, Bodiroga y Gentile. Y estoy orgulloso. Lo recomiendo, porque es una forma diferente de jugar. En Europa hay que ser muy fuerte mentalmente.

Completó su formación como técnico siendo segundo en las selecciones alemana y turca.

Fueron experiencias especiales, que hicieron crecer mis conocimientos. Logré el bronce con Alemania en el Mundial 2002 y la plata con Turquía en 2010. Ahora quiero ser asistente en la NBA o entrenar en Europa.

¿Puede España vencer a Estados Unidos en Londres?

Es una fantástica selección. Un equipo muy peligroso. ¡Ya pueden mentalizarse los jugadores de Estados Unidos! Por cierto, ¿cómo habéis logrado que Ibaka juegue en vuestra selección? ¡Vaya fichaje!