Shaquille dirige el debut de Ricky junto a las estrellas

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Shaquille dirige el debut de Ricky junto a las estrellas

Shaquille dirige el debut de Ricky junto a las estrellas

efe

Griffin y Lin acompañarán al base español en el Rising Stars

Las estrellas de la NBA llegan al Amway Center de Orlando poco antes del Inmortal World Tour de Michael Jackson y del show de Romeo Santos, ídolo latino. Y en el Fin de Semana de las estrellas de la NBA en Orlando, el All Star Weekend debuta Ricky Rubio: será a las 03:00 horas de la madrugada del sábado, en lo que hoy se llama Rising Stars Challenge y antes era la pachanguita típica de Rookies contra Sophomores, novatos de primer año en la Liga contra los de segundo año. Ya no es exactamente así.

Ahora, la NBA, harta de relajación y de muchos abusones en los Sophomores, agitó la chistera: Shaquille O'Neal y Sir Charles Barkley, dos figurones, elegirían a los jóvenes, mezclados en un Draft con bastante vena cómica. Aquí, en 1996, Shaquille se lió a silletazos con las paredes del viejo Orlando Arena tras cierto ridículo de sus Magic ante los mejores Bulls de Jordan. Ahí, Shaquille dejó su residencia de Orlando, en un estanque entre caimanes, y se fue a los Lakers.

Aquí y ahora, el tremendo Shaq ha echado talento: tiene toda la pinta de haber cogido el mejor equipo, con Ricky Rubio (cuarta elección) más Blake Griffin, el monstruo matador de Los Angeles Clippers y Jeremy Lin, el hombre que le ha cambiado a la vida a los New York Knicks. Norris Cole (Miami Heat), Landry Fields, buen colega de Lin en los Knicks, y dos espléndidos pistons, Greg Monroe y Brandon Knight, brillan entre la flotilla que dará escolta al acorazado Griffin, a la fantasía de Ricky y al pragmatismo agresivo de Lin: invitado especial de última hora.

A las órdenes de Sir Charles Barkley galopan John Wall y Kyrie Irving, dos bases como látigos que facturarán los daños a producir por dos buenas amenazas: DeMarcus Cousins y Derrick Williams, amiguete de Ricky en Minnesota. Iba Tiago Splitter, pero se quedó fuera por lesión de gemelo. No se ve cómo Barkley y los suyos puedan blindarse ante los cañones de Shaq. Ricky va a Orlando en medias de 11,3 puntos y 8,4 asistencias, dispuesto a disfrutar y hecho el base titular de unos Wolves que huelen el playoff: ayer batieron por 100-98 a Utah. Aquí está Orlando, aquí ataca Shaquille y con él llega Ricky.