Con el único objetivo de recortar distancias con Regal Barça y Real Madrid, Valencia Basket afronta la temporada 2012-13 con una plantilla competitiva, profunda y marcada por el sello Perasovic: defensa, intensidad, hambre y correr sin descanso. Eso sí, conviene no perder de vista que el club afronta el Año I sin Claver ni De Colo, que han cruzado el charco en busca de minutos en la NBA.

Que su sombra sea alargada o no dependerá, sobre todo, del rendimiento de dos especialistas que a priori ocupan la segunda unidad pero que acabarán siendo fundamentales: Pau Ribas y Thomas Kelati. Además, llegan a La Fonteta Justin Doellman y Bojan Dubjlevic, talento y centímetros para la pintura. A la espera del shooter que sigue buscando Toni Muedra -Marko Keselj sigue siendo el mejor colocado tras la fuga de Clay Tucker- esas son las incorporaciones del equipo de Perasovic.

El Valencia Basket se presentará ante su afición el próximo martes contra el Cajasol, aunque ayer más de mil personas acudieron a la Fuente de San Luis y ni había partido ni fichaje nuevo. El club presentaba su 'camiseta que habla' (la etiqueta contiene un código para descargar un mensaje de cada jugador en el móvil), en una gala que fue una oda al mensaje que lucen los jugadores en el pecho: "Cultura del Esfuerzo".

Independencia. Tras dar los agradecimientos al empresario Juan Roig, de nuevo "mecenas" de este proyecto, el vicepresidente Vicente Raga anunció que para este ejercicio el Valencia renuncia de las ayudas de instituciones públicas, que, todo sea dicho, iban a sufrir un recorte de por sí. Pero lo hace el club con la intención de que éstas "puedan ayudar a más causas sociales".