El Barcelona se clasificó para la final de la Supercopa gracias a un parcial de 17-3 en los cinco últimos minutos, justo después de que el Valencia lograra poner las tablas en el marcador tras ir por detrás desde el primer cuarto, un periodo en el que el conjunto azulgrana salió más enchufado y logró esa ventaja en torno a los ocho puntos de la que gozó durante casi todo el encuentro.

El poderío físico del Barcelona se impuso desde el inicio en este primer cuarto. Tomic, junto a Lorbek y Jawai cuando salió a la cancha, se hizo el dueño de la pintura y logró los primeros puntos del partido. El Valencia, con un escaso porcentaje de acierto en los tiros de dos durante todo el encuentro, ya perdía por 14-7 a los cinco minutos. Sólo la casta de Rafa Martínez impidió que la diferencia fuera mayor de diez puntos al final del cuarto.

Fue entonces cuando apareció Faverani en el partido para cortar la superioridad del Barcelona en el rebote y empezar a hacer daño debajo de la canasta. Y justo durante esa primera reacción del Valencia, Kelati se fue al suelo y tuvo que abandonar la cancha con claros signos de dolor. En una primera exploración parece que tiene afectado el ligamento de la rodilla y podría ser baja durante varios meses. Se le harán más pruebas mañana.

Tras la reanudación, con el Barça ganando 38-32, el partido entró en una sucesión de triples que cerró Abrines para poner el 57-49 a falta del último cuarto. La ventaja azulgrana llegó hasta los doce puntos y justo cuando parecía que el partido estaba sentenciado, un triple de Rafa Martínez y un posterior robo de balón en el saque de fondo cambiaron la dinámica del choque. El Valencia empató a falta de cinco minutos (60-60), pero Mickeal, extraordinario, lideró ese último parcial del Barcelona para disputar una nueva final de la Supercopa.