Una defensa sublime, un mayor aprovechamiento de sus efectivos y un gran juego coral le dieron la victoria y la clasificación para la siguiente fase al Barcelona Regal en Bamberg (66-86), en un partido en el que los locales resistieron hasta el descanso, justo el tiempo que pudo brillar su estrella Bostjan Nachbar.

Los de Xavi Pascual, que hoy jugaron su partido 500 en la máxima competición europea, sufrieron las exigencias de un equipo como el alemán, que ofreció un juego vistoso y mucho esfuerzo. En cuanto el Barça apretó su defensa y ajustó el juego interior el partido no tuvo historia. De hecho, los azulgrana cedieron 42 puntos en los primeros veinte minutos y 24 en los veinte últimos.

El triunfo se fraguó en el tercer cuarto. De un 42-47 con el que se llegó al descanso a un 53-64 diez minutos después. El último cuarto fue el de la confirmación del gran juego de los azulgrana que volvieron a mostrarse letales en todas las facetas y tuvieron a Pete Mickeal (17 puntos, 7 rebotes, 21 valoración) a su principal estrella.

Vivió el Bamberg durante muchos minutos del talento del esloveno Nachbar, de sus puntos, de su capacidad para sacar faltas, pero también de la capacidad atlética de los pívot de los alemanes para rebotear.

El Barça, por una vez, veía como perdía la batalla en la pintura. Por un momento se vio incapaz de frenar el juego ofensivo del rival y se dispuso a jugar un encuentro a muchos puntos, un nuevo escenario ante un crecido rival que venía de ganar los dos últimos partidos, el último en la cancha de Partizan.

Sin dudas, el equipo de Chris Fleming ofreció un baloncesto alegre y con juego en transición. Buscó la ventaja de Nachbar, defendido por su compatriota Lorbek, y apoyar el brío ofensivo con una buena capacidad reboteadora.

Se fueron los locales (14-10, m.6), pero reaccionó el Barça con un impecable Navarro y un acertado Lorbek (22-23). En el segundo cuarto, el Barça aprovechó los aciertos desde el exterior para poner la primera ventaja en el marcador (24-31).

Los triples de Navarro y de Ingles permitieron ciertas alegrías al ataque azulgrana, aunque el problema seguía atrás, en la defensa y en la capacidad para rebotear de los alemanes. Además, Nachbar tomó las riendas de la situación (17 puntos en los primeros 20 minutos) y el Bamberg igualó el partido (38-38). Sólo la calidad de Mickeal y un triple desde ocho metros de Navarro le dio aire al Barça, que en el ecuador dominaba por cinco puntos (42-47), pero no acababa de sentirse cómodo.

En cuanto el Barça apretó su defensa y los alemanes empezaron a sentirse exigidos -Nachbar sólo anotó un punto en la segunda parte-, el signo del partido cambió. Del 51-52 a 5:40 minutos para el final del tercer cuarto al 51-64, un parcial 0-12 y más de cuatro minutos en blanco. Eso fue definitivo para el Bamberg,

Los azulgrana supieron cómo atacar la defensa 2-3 planteada por el Bamberg y fueron aumentando su ventaja hasta el 66-86 final. Es el sexto triunfo de los catalanes en seis partidos y la clasificación asegurada para la siguiente ronda.