Los Ángeles Lakers pusieron fin a una racha de cuatro derrotas consecutivas y con un gran despliegue de baloncesto colectivo, liderado por un generoso Kobe Bryant, derrotaron a Utah Jazz (102-84), equipo al que no superaban en el Staples Center desde diciembre de 2011.

Bryant, más líder que nunca, se quedó a las puertas de su decimonoveno triple-doble (14 puntos, 14 asistencias, 9 rebotes) y a una asistencia de igualar su récord en la NBA (en 2002 frente a Washington), mientras que Pau Gasol, de nuevo saliendo desde el banquillo, contribuyó con 15 tantos (7/8 en tiros) y 7 rebotes. Dwight Howard y Metta World Peace (5/11 en triples) añadieron 17 puntos cada uno.

El máximo anotador de los Jazz fue Derrick Favors, con 14 tantos. Los locales ofrecieron buenas sensaciones desde el primer momento; desde la mayor intensidad y actividad de Howard (11-2), pasando por el elevado porcentaje desde el perímetro gracias al acierto de Metta World Peace y la facilidad de Bryant -que repartió 5 asistencias en el primer cuarto- para encontrar al hombre mejor situado.

Gasol comenzó titubeante desde la personal (1/4) pero despertó en el segundo cuarto con cuatro puntos seguidos (33-27) y un buen trabajo defensivo, pero Utah no perdía comba gracias sobre todo a la entrada en cancha de Gordon Hayward y Derrick Favors, revulsivos para unos Jazz sin demasiado ritmo ni consistencia.

Los Lakers, aprovechando su amplia ventaja en el rebote (25-14), se fueron al descanso con una sólida renta (45-35). Sin un base velocísimo en frente, los californianos pusieron énfasis en la defensa sobre Randy Foye, que no vio aro hasta el minuto 26, y neutralizaron a la perfección a los hombres altos de Utah, especialmente al turco Enes Kanter.

Nash, aprovechando que Bryant tenía entre ceja y ceja facilitar el juego, no dudó en mirar al aro mucho más que de costumbre y liderar el buen arranque de los suyos en la segunda mitad, aunque la constancia de Favors y la labor de Paul Millsap y Al Jefferson en la zona hicieron que Utah nunca arrojara la toalla (61-58).

Sin embargo, tres triples consecutivos (dos de World Peace y uno de Chris Duhon) tras asistencias de Bryant dieron oxígeno a los angelinos a falta de un cuarto por jugar (72-63). Esa racha amansó a su contrincante, que ya no pudo remontar el vuelo mientras asistía a la exhibición técnica de Gasol, con penetraciones desde la parte alta de la zona y suspensiones de cinco metros.

El equipo respondía -incluidos secundarios como Jodie Meeks- y ofrecía su mejor imagen en semanas (85-69), con movimientos interesantes de Howard en la pintura y pinceladas de claqué de un Bryant físicamente recuperado tras sus malas actuaciones de la última semana.

La mejoría exhibida hoy por los Lakers se pondrá a prueba este domingo frente a Oklahoma, el mejor equipo de la Liga.