La Copa buscaba nueva reina y ésta no es otra que Perfumerías Avenida. El equipo salmantino se afianza en el trono con su cuarta corona en el torneo del KO, el que más cetros tiene de los que sigue en activo, pero lo hizo con prórroga, en un final de infarto y con Murphy templando los nervios del millar de aficionados salmantinos que se acercaron a Torrejón con esos dos tiros libres a falta de 2,7 segundos que valen una Copa.

El Rivas empezó mal. Más de cinco minutos sin anotar una canasta hasta que Rachel Allison inauguraba el marcador, pero el juego de ambos equipos era como el Guadiana, aparecía y desaparecía. Sólo así se explican esos primeros fallos del equipo ripense o la posterior sequía que sufrió el Avenida cuando mejor le iban las cosas, cuando mandaba en el marcador por 11 (13-2, min. 8) y vio como su ventaja se reducía a sólo un punto en un suspiro, con un triple sobre la bocina de Eldebrink o la entrada en pista de Clara Bermejo (16-15).

Xargay daba el susto con un costalazo al volar por encima de Halvarsson, pero la base del Avenida necesitaba menos de un minuto para volver a pista y con ella sobre el parqué, con la intensidad que imprime la catalana, el equipo charro corría para volver a aumentar su ventaja (24-17), antes de que Nicholls, con el segundo triple sobre la bocina de la tarde, mandara al vestuario a su equipo con la primera ventaja para su equipo (24-25).

Tras el parón, el partido se convirtió en una batalla entre Eldebrink y Robinson. Que si la sueca mete un triple, respuesta inmediata de la americana bajo el aro; que si ahora es Robinson quien acierta de tres, la alero del Rivas se sacó un as de la manga para anotar de cinco metros. En resumen, y a pesar de las apariciones esporádicas de Halvarsson en el Rivas y Marta Fernández en el Avenida, Eldebrink cerró el cuarto con diez puntos y Robinson, con once, una actuación que le valió después el MVP. El equipo salmantino puso la directa en el último cuarto. Parecía que el Rivas no tenía mucho que hacer tras un triple de Marta Fernández (52-42), pero el equipo rojillo no se resistía: Laura Nicholls sumaba poco a poco (ocho puntos en este cuarto) para que Eldebrink rematara con un triple (56-54). Faltaba 1:56 y se oían los gritos de “Sí, se puede” por parte de la afición del Rivas, que creía en el milagro. Y más aún cuando Nicholls tenía un 2+1 para igualar el duelo a falta de un minuto, pero la santanderina fallaba y Murphy, acostumbrada a finales de alto voltaje, no lo hacía desde la esquina: 61-58. A la que tampoco le falló el pulso fue a Eldebrink que igualaba el encuentro a falta de 19 segundos con otro triple, imponiendo en el luminoso el 61-61 que terminó en el tiempo reglamentario por doble fallo en el tiro libre de Krystal Thomas.

Pero la vida está llena de segundas oportunidades y el Avenida la tuvo. Con empate a 67, el Rivas tenía la última posesión para conseguir su tercer título copero o prolongar el partido otros cinco minutos, pero Eldenbrink se empachó de balón y su compatriota Halvarsson cometió falta, mandando a la línea de personal a Murphy. Pero Murphy no es Thomas y con esos dos tiros libres mandó la cuarta a Salamanca.