Lamar Odom no viajará mañana a Grecia y causa baja en el partido que disputará el Laboral Kutxa este viernes (20.45 horas, Sportmania) ante el Panathinaikos, por una sobrecarga en la zona lumbar. El jugador ha sido sometido a pruebas médicas y se ha decidido que pare a fin de llevar a cabo un tratamiento supervisado por los servicios médicos del Baskonia. Es el primer contratiempo de la superestrella norteamericana, al que Scariolo primero fijó un mes para ponerse en forma pero finalmente le ha metido en partidos de gran exigencia, como ante el Valencia el pasado fin de semana. En ese sentido, Odom, que llegó a Vitoria hace 15 días después de diez meses alejado de las canchas de baloncesto, y ha disputado dos encuentros con el Laboral Kutxa, aunque sus actuaciones han sido discretas. Tiene un contrato de dos meses y se estrenó ante el Unicaja en Euroliga, en un encuentro en el que jugó seis minutos y apenas tuvo incidencia.

Por su parte, Scariolo desveló que Poeta sí se une a la expedición tras superar el período de baja. El técnico italiano quiere un final decoroso en la Euroliga. “Ahora mismo tenemos que clasificarnos para el playoff, que es el tercer objetivo de la temporada. Creo que el mejor camino es competir con energía, cohesión y esfuerzo y haciéndolo lo mejor posible el partido frente a Panathinaikos para afrontar el choque, de extrema importancia, del domingo. Los jugadores tienen que estar tranquilos y pensar en jugar bien, luchar y competir el partido frente a un rival grande para afrontar el partido de Liga con un empujón de optimismo más.”

“En los momentos de dificultad hay que estar juntos, hay que saberse a poyar y sufrir juntos –prosiguió-. El equipo en la cancha tiene que dar el primer paso y quiere llegar al límite de sus posibilidades porque así el público va a responder. A veces la impotencia y la frustración se pueden confundir con desgana pero el equipo está unido y está trabajando muy bien. Tenemos que transmitir que queremos esforzarnos y que no hemos perdido la fe, que es un equipo que entrena mucho mejor que lo que luego pasa el día del partido sobre todo bajo presión. Son situaciones psicológicas y creo que se pueden solucionar sumando resultados positivos”. Se le preguntó por su estado anímico y el ex seleccionador se puso aún más serio: “Estoy fastidiado porque nunca he perdido en mi vida tantos partidos en un tiempo reducido pero con las ideas muy claras de porqué se producen las cosas. Estoy con ganas de competir, de clasificarnos para el playoff y dar guerra y terminar dignamente la Euroliga. Sé actuar bajo presión y lo he demostrado”.