La lesión que padece Serge Ibaka en el gemelo de la pierna izquierda amenaza con traer cola. No sólo se perderá lo que queda de playoffs con Oklahoma City (ni siquiera viajó con el equipo a San Antonio para presenciar los dos primeros encuentros de la final del Oeste ante los Spurs), sino que en Estados Unidos temen que pueda quedar mermado una vez se recupere.

El hermetismo de los Thunder no ayuda a mitigar las rumores sobre el verdadero estado del ala-pívot nacionalizado español. De hecho, existen informes que hablan de que padece una rotura del músculo plantar, una lesión conocida como tennis leg y cuya recuperación es prolongada debido al alto riesgo a sufrir una recaída.

El misterio se acrecenta al tener en cuenta que un 15% de las personas no cuenta con dicho músculo. Es aquí donde surgen los miedos en el equipo: les asusta que pueda ver reducida su capacidad atlética, o lo que es lo mismo, que no vuelva a ser el mismo jugador.

Duda. Todo este asunto puede llegar a repercutir a la Selección, con la que podría no disputar la Copa del Mundo de España este verano y dejar vía libre para la convocatoria de Mirotic. Tal posibilidad ya le dejó entrever Sam Presti, mánager general thunder, en pos de proteger a una de las piezas fundamentales de la plantilla. Algo comprensible, teniendo en cuenta que ha firmado sus mejores números en su quinta temporada en la NBA.