El veterano ala-pívot Tim Duncan, que se convirtió en el jugador más importante y decisivo del triunfo a domicilio (107-112) que consiguieron los Spurs de San Antonio en la prórroga del sexto partido de las Finales de la Conferencia Oeste, dijo que volver por segundo año consecutivo a luchar por el título de la NBA era algo "excepcional". "Recuperar la concentración después de la manera como perdimos el año pasado las Finales de la NBA tiene un mérito excepcional", destacó Duncan, que aportó un doble-doble de 19 puntos, incluidos los cuatro decisivos de la prórroga para el parcial de 107-110 y 19,2 segundos por jugarse, y 15 rebotes.

Duncan reconoció que todavía se habla de los Spurs como el equipo que no pudo asegurar un triunfo que tuvo en su manos y que dejó escapar ante los Heat de Miami, que serán de nuevo los rivales este año al revalidar el título de campeones de la Conferencia Este.Los Spurs perdieron las pasadas Finales de la NBA por 4-3 al mejor de siete después de haber dejado escapar el triunfo en el sexto partido, en la prórroga, y cayeron derrotados en el séptimo y decisivo. "No gamos el año pasado, pero estamos listos para hacerlo éste", subrayó Duncan. "Nos sentimos muy felices de tener de nuevo a los Heat como rivales. El mal sabor de la derrota todavía lo mantenemos en nuestras bocas".

Junto a Duncan la gran figura del partido fue el ala-pivote francés Boris Diaw, la gran adquisición de esta temporada del entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, que como reserva surgió como factor ganador al anotar 26 puntos, que compensaron la ausencia por lesión en la primera parte de su compatriota, el base Tony Parker. "No sabíamos el tipo de lesión que sufrió Parker en el tobillo izquierdo", comentó Diaw. "Pero nadie dentro del equipo deseaba disputar el séptimo partido, al margen de si Parker podría jugar o estar al ciento por ciento, de ahí que queríamos concluir esta noche". La anotación de Diaw fue la tercera mejor en su carrera profesional, de 11 años, en la competición de la fase final, y la mejor desde el 2006. "Boris (Diaw) estuvo increíble", subrayó Duncan. "tuvo un partido excepcional y completó una gran serie".

Mientras que el veterano escolta reserva, el argentino Manu Ginóbili, que junto a Duncan y Diaw fue decisivo en el juego individual y de equipo de los Spurs al aporta 15 puntos, seis rebotes y cinco asistencias, reconoció que habían ganado a un gran equipo. "Hemos superado un obstáculo muy difícil", comentó Ginóbili. "Son un muy buen equipo, que cuentan con mucho talento y poder atlético, que los proyecta con un gran futuro". Ginóbili reiteró que los Thunder habían sido un equipo muy duro de superar y eso demuestra el gran trabajo que realizaron los Spurs.

El mismo sentir mostró el entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, que reconoció que ganar a un rival como los Thunder les dejaba mejores sensaciones y satisfacción. "Tengo que ser honesto y decir que esta victoria es muy plena porque dentro del equipo sabíamos con que tipo de rival nos enfrentábamos y eso nos da una gran satisfacción por lo especial que son los Thunder", subrayó Popovich. "Lo mismo nos sucederá cuando nos enfrentemos a los Heat". Los Spurs por primera vez en su historia disputaran dos años consecutivos las Finales de la NBA.

Mientras que el entrenador de los Thunder, Scott Brooks, reconoció que su equipo no estuvo inspirado en los tiros a canasta, al hacer demasiados en suspensión, lo que demostró que no teníamos buena penetración cuando buscábamos ir al aro. Brooks también reconoció que de nuevo el equipo no hizo buena defensa en los momentos decisivos, todo lo contrario de lo que sucedió con los Spurs, que a pesar de dejarse escapar una ventaja de 12 puntos en el cuarto periodo, supieron reagruparse y encontrar la manera de conseguir la victoria. "Tuvimos la oportunidad de haber ganado el partido y llegar al séptimo y decisivo, pero el mérito hay que dárselo también a los Spurs que reivindicaron su condición de equipo que concluyó la temporada regular con la mejor marca (62-20) de la liga", agregó Scotts.