Parecía una opción muy probable que LeBron James optara por salir al mercado y no mantener su actual contrato con Miami Heat, lo cual no implica que vaya a irse definitivamente de Florida pero sí que la NBA ya ha empezado a subir revoluciones mientras aguarda la decisión del jugador que en la última temporada ha perdido el título de campeón y los MVP tanto de la Regular Season como de las Finales. LeBron James va a ganar mucho dinero, claro, pero quiere hacerlo compitiendo por más anillos. Por ahora lleva dos en cinco finales, una con los Cavaliers y cuatro seguidas con los Heat.

LeBron podía haber continuado en Miami sin ejecutar su cláusula de salida y cobrar 20,5 millones dólares la próxima temporada y 22,1 en la 2015/16. Ahora firmará un contrato nuevo que será más o menos lucrativo en función de cuánto esté él dispuesto a conceder para que su equipo haga la mejor plantilla posible. La próxima temporada el tope salarial estará en 63,2 millones (fue 58,6 la pasada), y con ese margen tendrá que jugar un LeBron que si firma el contrato por el máximo posible se iría por encima de lo que tenía firmado ya en esos dos primeros años: 20,6 y 22,2 millones. Ese contrato le llevaría hasta 26,8 millones en la temporada 2018/19. En total, más de 118 millones y medio por las próximas cinco temporadas, que podrían ser hasta 127,7 si firma ese nuevo contrato con el que era su equipo, Miami Heat. Sin embargo, lo normal es que James, que además gana una cantidad ingente de dinero gracias a sus contratos promocionales, acepte un recorte (ya lo hizo, como Bosh y Wade, para la primera versión del big-three de Miami) que le permita tener los compañeros idóneos para jugar más finales y ganar más anillos.

El destino más probable, a pesar de este movimiento contractual, sigue siendo Miami Heat. La franquicia de Florida necesita reconstruirse y podría verse según los movimientos que se produzcan sin más contrato garantizado que el de Norris Cole por poco más de dos millones. Pat Riley pretende convencer a LeBron, Wade y Bosh para que sigan juntos y darles un grupo de compañeros que les ayude a ganar. En los últimos playoffs echaron mucho de menos a Mike Miller o versiones mejores de Battier, Haslem o Chalmers. Lo que es seguro es que con su salida al mercado, LeBron mete mucha presión a Miami: si no llegan los jugadores adecuados y no ve claro el futuro competitivo del equipo, podrá irse a cualquier otro sitio. Aviso a Riley y al dueño, Micky Arison. Las matemáticas del ahora subcampeón pasan porque LeBron y Bosh no fueran más allá de los 17 ó 18 millones anuales y de que Wade se quede poco por encima de los diez millones a cambio, eso sí, de un contrato lo suficientemente largo para que la cifra final sea convicente.

A partir de ahí comienzan las cábalas, muchas difíciles de predecir porque tienen que ver con los movimientos que hagan las franquicias, con lo que suceda en la noche del draft y con el destino final de otro gran agente libre como Carmelo Anthony y de una estrella con contrato pero muy cerca de cambiar de aires, Kevin Love. Chicago Bulls y Houston Rockets aparecen como opciones como sucede también en el caso de Carmelo. Las dos franquicias buscan las piezas que les acerque a la primera fila de parrilla de salida hacia el anillo. Los Rockets sueñan con colocar vía traspaso los contratos de Asik y Lin (14,8 millones por cabeza en la próxima y última temporada) para sumar otra estrella a la pareja Harden-Howard, que en la 2014/15 percibirán 21,4 millones el pívot y 14,6 el escolta. Seguramente, también tendrían que dejar marchar al alero Chandler Parsons, que ultima contrato rookie antes de firmar por una buena cifra a la que se ha hecho acreedor.

Los Bulls también tienen margen para disponer de la flexibilidad necesaria. Su maniobra más obvia pasaría por amnistiar a Carlos Boozer (16,8 millones para terminar contrato la próxima temporada) y hacer un traspaso que implicara a Taj Gibson, un ala-pívot con mucho mercado que tiene comprometidos más de 25 millones hasta 2017. Los Bulls tienen bazas teóricas pero las miras puestas, o eso parece, en Carmelo Anthony.

A partir de ahí, el resto de posibilidades parecen todavía más arriesgadas. Un rumor constante en los últimos dos años ha sido un probable regreso a Cleveland Cavaliers, de donde salió en 2010 de forma como mínimo abrupta. La franquicia de Ohio ha ido limando asperezas públicas con el que fue su ídolo en busca de un reencuentro que de todas formas no parece fácil. LeBron se encontraría con un grupo de jugadores joven y muy prometedor, encabezado por Irving y el número 1 del próximo draft. Si se descarta a equipos con margen salarial pero pocas opciones reales como Charlotte, Phoenix o Washington, otros que podrían aparecer como tapados serían Dallas Mavericks o los equipos de Los Angeles, Clippers y Lakers. Los Mavs lo llevan intentando sin suerte con grandes piezas del mercado desde que fueron campeones precisamente ante los Heat de LeBron. No pudieron atraer ni a Howard ni a Chris Paul, por ejemplo, y lo tendrán difícil con James toda vez que buena parte de su margen salarial se irá en el nuevo contrato que con certeza firmará Nowitzki.

En cuanto a L.A., los Clippers serían ahora mismo la opción deportiva y los Lakers la del mercado global y la camiseta legendaria. A nivel competitivo, no parece fácil que estos últimos estén listos para llevar ya lejos a LeBron, con Kobe Bryant y sus 48 millones comprometidos para las dos próximas temporadas. Los Lakers, eso sí, tienen margen para firmar a un gran agente libre que podrían ser dos si, por ejemplo y como se rumorea, se deshacen de su pick 7 del próximo draft a cambio de que el destinatario absorba también los más de 19 millones del contrato que tiene firmado Steve Nash para los dos próximos años. Esta opción abre la puerta al rumor de un posible big-three Kobe-LeBron-Carmelo. Por ahora, una opción improbable.

A nivel competitivo, los Clippers son una opción obvia: un equipo tremendo a falta de conjugar sus piezas para ir definitivamente a por el anillo. Para hacerse con LeBron tendrían que soltar, y se abriría la opción del sign and trade con los Heat, a jugadores como DeAndre Jordan, JJ Redick o incluso Blake Griffin. Otra opción apenas probable toda vez que además LeBron podría optar por seguir en el Este a la vista de la ultra competitividad que preside el Oeste y que parece que sólo irá en aumento en un futuro próximo. Así que muchas puertas están abiertas por mucho que la de Miami sea la más cercana para el Rey. Hagan sus apuestas.