Adam Silver volvió a hablar sobre la conveniencia de ceder jugadores NBA para que estos disputen torneos internacionales con sus países de origen. "Es un gran riesgo sin grandes recompensas económicas", admitió el comisionado de la Liga, durante una rueda de prensa celebrada tras la renovación del acuerdo que la NBA tiene con el Departamento de Defensa de Estados Unidos.

Acto seguido, matizó sus impresiones. "Estoy sentado junto al oficial militar de mayor rango (el general Martin Dempsey), por lo que casi me avergüenza estar hablando sobre los riesgos que corren nuestros jugadores en comparación a aquellos que asumen nuestros hombres y mujeres en servicio. Sólo quiero reiterar que, en última instancia, es una decisión personal de cada jugador", aclaró el dirigente.

A su vez, también quiso recordar que no sólo son los jugadores de Estados Unidos los que corren el riesgo de lesionarse, tal y como sucedió con Paul George a principio de mes durante la concentración del equipo de Krzyzewski en Las Vegas. "Quiero señalar que no sólo nos referimos a jugadores estadounidenses. Aproximadamente, en conjunto, habrá unos 50 jugadores NBA representando a sus respectivos equipos nacionales. Por lo que, desde el punto de vista de la Liga, tenemos que fijarnos en todas las nacionalidades, no sólo en el equipo estadounidense", expuso. "Como dijo el propio George, no tiene remordimientos de haber acudido a la llamada del equipo. Larry Bird también lo dijo, las lesiones son algo normal en el deporte. También podría haberle ocurrido fuera de la selección", concluyó.