Los New York Knicks se presentaron ante su afición en el Madison Square Garden y lo hicieron con derrota (76-81) ante los Toronto Raptors. Derek Fisher rotó mucho a sus jugadores y ni Calderón ni Carmelo Anthony jugaron el último cuarto de hora de partido, momento en el que los Raptors, también con sus suplentes, remontaron los diez puntos de ventaja que tenían los neoyorquinos (50-40). El base español cuajó un encuentro muy completo y sigue adaptándose al sistema ofensivo que propone Fisher: anotó 8 puntos, repartió 4 asistencias y recogió 4 rebotes en los 17 minutos que estuvo en pista.

En los Raptors, sin Kyle Lowry ni Jonas Valanciunas, destacó su gran fichaje de este verano: Lou Williams. El base-escolta, ex de Sixers o Hawks, se fue hasta los 21 puntos y fue determinante en la remontada del equipo canadiense.

Los Knicks volverán a jugar esta noche ante Philadelphia, de ahí que Fisher no quisiera forzar a sus jugadores y sólo JR Smith, Quincy Acy y Tim Hardaway Jr disputaron más de 20 minutos. El nuevo técnico apostó por Carmelo como ala-pívot con Dalembert como único interior grande, y con Shumpert haciendo pareja exterior con Calderón.