La NBA ha anunciado este martes realizar, de forma experimental, una serie de cambios en el formato del partido que enfrentará el 19 de octubre a los Brooklyn Nets y los Boston Celtics de pretemporada.

Las modificaciones afectarán a la duración del encuentro y al número de tiempos muertos en dos cuartos. Así, el partido durará 44 minutos en vez de los 48 normales y se eliminará un tiempo muerto obligatorio en el segundo y cuarto periodo (dos en vez de tres).

No será la primera vez que se juega por debajo de los 48 minutos. Hasta la década de los cincuenta, los partidos se disputan a 40 y la Liga Universitaria se juega como se hacía antes en Europa, 40 minutos divididos en dos tiempos de 20.

La idea no es nueva y ya se propuso en la última reunión de la NBA con los entrenadores, según Rod Thorn, presidente de operaciones de la Liga. El motivo: hacer más fluidos los encuentros. ¿Qué significa esto? Simplemente hacer los partidos más cortos, para poder mantener a la audiencia conectada desde el principio hasta el final, ya que es cada vez más difícil que los nuevos consumidores de televisión, principalmente los más jóvenes, estén pendientes de un encuentro que se va más allá de las dos horas.

Esta iniciativa es simplemente una prueba. La NBA quiere estudiar cualquier tipo de idea que mejore el juego y el interés hacia la Liga, pero el recorte de cuatro minutos tiene dos puntos en contra.

Por un lado, la reducción de tiempos muertos, puede provocar una reducción en la publicidad. Consecuencia: habría menos dinero. Y por otro, y aunque parezca mentira, el que puede ser más importante, las estadísticas y los récords.

Todo jugador de la NBA mide su carrera por los anillos conquistados y por los números que ha conseguido. Si la Liga hace que los encuentros duren 44 minutos, sería casi imposible igualar los récords por partido a 48 ya establecidos, y los de temporada... casi una misión suicida porque la reducción equivaldría a borrar 10.840 minutos de juego, lo que es equivalente a 226 partidos, y alrededor a 45.000-46.000 puntos menos cada campaña.