Estrella Roja de Belgrado (Serbia) – Estrella: Nikola Kalinic

El Estrella Roja vuelve a la Euroliga por segundo año consecutivo después de realizar su mejor temporada en este presente siglo… aunque muy lejos de su glorioso pasado. Por segundo año consecutivo se alzó con la Copa Serbia de baloncesto y se quedó a las puertas de acceder a la final de la Liga Adriática (eliminado por la Cibona de Zagreb) y de la Liga de su país (Partizán).

Su paso por la máxima competición continental la pasada temporada estuvo envuelto en luces y sombras. Por un lado, logró sorprender al Panathinaikos en Atenas y al Maccabi, que a la postre sería el campeón de la Euroliga, en Tel Aviv; pero por el otro, la fortaleza de su grupo no le permitió avanzar al Top-16 (4-6).

Para esta campaña, el equipo serbio ha perdido a dos medallistas en la Copa del Mundo como Rasko Katic, que ha llegado para fortalecer al CAI Zaragoza en la Liga Endesa y en la Eurocopa, y Marko Simonovic, cuyo destino ha sido Francia y el Pau Orthez. A cambio, tiene entre sus filas al suplente de Milos Teodosic durante la competición en España, Stefan Jovic (esolta, 23 años y 1,90), y a una de las grandes perlas del baloncesto serbio, Nikola Kalinic (alero, 22 años y 2,03). Además, cuenta entre sus filas con un viejo conocido de la Liga Endesa como Marcus Williams y un ex de Golden State y Philadelphia 76ers, Charles Jenkins.

Galatasaray (Turquía) – Estrella: Carlos Arroyo

El Galatasaray afronta su tercera participación en la máxima competición continental en los cuatro últimos años en calidad de subcampeón de la cada día más potente liga turca. Únicamente el Fenerbahçe del maestro Obradovic privó a los de Ergin Ataman en el séptimo y último partido de la final de revalidar la corona doméstica lograda en la 2012-13. El club que introdujo el baloncesto en Turquía se antoja como uno de los rivales de mayor entidad del Grupo D.

La campaña pasada logró su techo en la Euroliga, alcanzando una histórica clasificación para los cuartos de final. Lograron dicho pase sumando cuatro triunfos en sus cinco últimos duelos del Top-16 (únicamente sucumbieron ante el todopoderoso CSKA en dichas jornadas). Ya en el playoff, pese al buen hacer de Carlos Arroyo, sucumbieron por un contundente 3-0 ante el Barcelona.

Para este año, y pese a la importante baja que supone la ausencia de Pops Mensah-Bonsu en la pintura, el Galatasaray ha mantenido su columna vertebral, a la que ha añadido jugadores de una indudable calidad: Vladimir Micov, Martynas Pocius o Kerem Gonlum. Junto con ellos, la recuperación y posterior renovación de Nathan Jawai supone la mejor noticia posible para un equipo que, liderado por el ya muy veterano Carlos Arroyo, aspira a seguir creciendo entre los mejores equipos del Viejo Continente.

Neptunas Klaipeda (Lituania) – Estrella: Mustafa Shakur

La ciudad de Klaipeda se estrena en la Euroliga. Situada al oeste de Lituania es hasta el momento el único puerto de importancia del país en el mar Báltico. A pesar de ser un novato en la máxima competición continental, el equipo es histórico en Lituania y ha dado grandes estrellas que triunfaron en España, concretamente en el Baskonia, como Arvydas Macijauskas y Saulius Stombergas.

Fundado en 1962, la pasada temporada disputó sin mucho éxito la Eurocopa y no alcanzó los playoffs de la Liga VTB, pero brilló en la Liga lituana. Liderados por Martynas Mazeika, Valdas Vasylius y Vyuautas Sarakauskas, el Neptunas se coló en la final por primera vez, aunque allí fue sometido por el Zalgiris Kaunas (4-2).

Esta temporada, el equipo de Maksvytis está invicto en su competición y tiene la asombrosa peculiaridad de que nueve de sus doce jugadores han nacido en Klaipeda. Fuera de ese curiosidad queda su estrella Mustafa Shakur, un trotamundos del baloncesto que disputó 14 partidos con el Baskonia (2008-09).

Olympiacos (Grecia) – Estrella: Vassilis Spanoulis

Olympiacos tiene como objetivo volver a conquistar algún título en el presente curso. Quiere borrar el mal sabor de boca que supuso la temporada pasada, en la que cedió en el quinto y definitivo encuentro de la final de la liga griega ante el Panathinaikos, su eterno rival. Dicha derrota, puso el punto y final a una racha de cuatro temporadas consecutivas (de la 2009-10 a la 2012-13) levantando copas.

Y para ello, no habría mejor antídoto que conseguir su cuarta Euroliga. Tras alzar el trofeo en Estambul (2012) y Londres (2013), el Olympiacos se quedó a un paso de repetir presencia en la Final Four por tercer año seguido. Su verdugo, un Real Madrid que supo hacer valer el factor cancha en el playoff de cuartos de final.

Olvidado el traspié, Vassilis Spanoulis (uno de los mejores jugadores en Europa, sino el mejor) buscará devolver a los de El Pireo a la élite. Lo intentará bajo las órdenes del nuevo técnico Milan Tomic, elegido para reemplazar a un Georgios Bartzokas que dimitió hace menos de una semana. Tomic deberá saber gestionar una amplia plantilla que mantiene el mismo bloque de hace un año (Dunston, Sloukas, Printezis, Mantzaris…) y que ha unido talento y trabajo defensivo a partes igauales con los exACB Tremmell Darden y Oliver Lafayette, así como potencial interior con Othello Hunter.