Mucho mirar a la Final Four, pero el verdadero triunfo es llegar vivo a mayo, completar el trayecto con fases como la actual, que se graban en la piel de los jugadores a fuego de kilómetros. El Madrid ya lo sabe, aunque tendrá su dosis de recuerdo de aquí a diciembre: cinco salidas y 31.035 kilómetros en total. Ningún otro equipo de la Euroliga viajará tanto durante la primera fase. Y para empezar, la chuleta entera en el asador: ayer de Madrid a Kazán en chárter­ (4.160 km), donde espera hoy el Unics (17:00, C+ Deportes y E3). Bocinazo final y maletas rumbo a Tenerife (5.970 km) porque el domingo (19:00, Tdp) visita al Iberostar. Ese mismo día regresará a Barajas, otros 1.795 km para un total de 11.925 en apenas cuatro días.

La expedición dejará hoy Kazán a las once de la noche hora rusa (nueve en España) y aterrizará a las 4:15 en el aeropuerto de Tenerife Sur. Más de 30º de temperatura de diferencia (de -10º a más de 20º) y tres horas en el huso horario para un vuelo que supera las ocho. Luego vendrán otros tres desplazamientos de larga distancia: Estambul, Kaunas y otra vez Rusia, Novgorod. Para cerrar el grupo en Cerdeña, ante el Dinamo Sassari, que dado los precedentes parece como ir de visita a Toledo.

Pero primero toca el Unics, que logró el billete en la previa y presume de plantilla. Ha fichado del Armani Milán a Jerrellls­ y al máximo anotador de la pasada Euroliga, Langford. Y cuenta con Zisis y Kaimakoglou, la conexión griega junto al técnico Pedoulakis, ex del Panathinaikos. Y tiene también a James White, Sanikidze, D’or Fischer... Un equipo de rachas, de talento, con puntos en sus manos. Una salida de aúpa.