Ibon Navarro se ha convertido en el quinto entrenador del Laboral Kutxa en dos años, después de que el italiano Marco Crespi fuera destituido ayer tras la derrota del equipo en casa ante el Estrella Roja en la Euroliga. El desfile de técnicos comenzó el 18 de noviembre de 2012 con la marcha del montenegirno Dusko Ivanovic, que entrenó a los baskonistas durante nueve temporadas y media repartidas en dos etapas.

Su sitio en el banquillo lo han ocupado después Zan Tabak, Sergio Scariolo, Marco Crespi y ahora le llega el turno a Ibon Navarro, que dirigirá al Baskonia en el derbi vasco de mañana frente al Gipuzkoa Basket.

Está por comprobar si la presencia del vitoriano es transitoria y el Baskonia se mueve en el mercado para buscar un nuevo entrenador que trate de enderezar el rumbo del equipo. La entidad azulgrana se ha caracterizado tradicionalmente por la tranquilidad y largas estancias de muchos de sus entrenadores, pero en los últimos tiempos la falta de buenos resultados deportivos pasado han llevado al Baskonia a destituir cuatro entrenadores en dos años.

Tras la salida de Dusko Ivanovic se le dio una oportunidad a Zan Tabak, que había desempeñado un buen trabajo como asistente y en categorías menores. Bajo su dirección el Baskonia llegó a disputar el cruce de cuartos de final en la Euroliga ante CSKA de Moscú, pero tropezó en semifinales ligueras y se quedó fuera de los cuatro mejores de la ACB por primera vez en nueve temporadas.

El presidente de la entidad, Josean Querejeta, optó el pasado año por abrir una segunda etapa con Sergio Scariolo tras la fructífera relación de hace 16 años, en la que el italiano llevó al club a jugar su primera final de la liga. No fue un gran año en la competición doméstica ni en la continental, ya que tampoco se alcanzaron las semifinales y no se hizo un buen papel en el Top-16 de la Euroliga.

En verano se negoció la rescisión del año de contrato que aún tenía firmado el italiano y el 21 de julio se presentó en el Buesa Arena a Marco Crespi como el encargado de reflotar al equipo. Sin embargo, no ha llegado a los cuatro meses de estancia y tras doce partidos con un balance de cuatro triunfos, la derrota de anoche ante el Estrella Roja por veinte puntos de diferencia ha provocado su salida fulminante del Baskonia.

CRESPI: "LAS COSAS NO SALIERON COMO ESPERABA, LO SIENTO"

El extécnico del Baskonia emitió un comunicado para despedirse: "Lo siento. El baloncesto es mi vida. La ilusión de entrenar el Baskonia era como un sueño. La pasión que tiene el mundo baskonista es de calidad. Las cosas no han salido como quería y pensaba. Lo siento. Como persona y como entrenador. No me gusta decir más, tengo muchas opiniones en mi cabeza. Pero conozco que significa tener respeto y ahora no es el momento de hacer más valoraciones. Gracias”.