El Obradoiro tenía tomada la media al Palacio de Deportes desde que Moncho Fernández, un ex del banquillo murciano, lo visitaba con el cuadro gallego. A punto estuvo de prolongar su maldición y acabar con el fortín local (donde nadie ganó esta temporada) pero la mayor intensidad y acierto de Cabezas y Neto en los últimos minutos fue decisiva. Antes de todo eso el auténtico líder resulto ser Bamforth. Salía de una lesión pero mantuvo a su equipo cuando Río Natura amenazó con abrir brecha en el tercer cuarto tras el 42-48. Pudo ganar cualquiera, pero el UCAM Murcia  se hizo más fuerte en los momentos en los que la bola quema.

El primer tiempo fue realmente extraño. Con una defensa asfixiante, los de Ocampo secaron al Obradoiro para dejarle con un 22-7 tras el primer cuarto. Parecía increíble que con un parcial de 2-25 los gallegos remontaran en el segundo tras una consecución de triples espectacular. Al descanso el partido estaba igualado pero tras el mismo tomó la iniciativa Río Natura y enfrente sólo la intensidad de Radovic, Rojas y especialmente Bamforth mantenían el electrónico en equilibrio. Los de Moncho Fernández llegaron a amenazar con ese 42-48 pero ahí se rehizo el UCAM. De forma paulatina y aprovechando cada detalle, ambos equipos se adentraron en el último cuarto metiendo la directa pero los locales reventaron el choque con dos triples vitales de Cabezas. Con este triunfo se cerró la maldición de Moncho (el año pasado una paliza de su equipo costó el cargo a Óscar Quintana) y Murcia pisa zona de Copa a costa de sacar a un Río Natura donde destacaron Kleber y un Corbacho que se reencontró con el triple.