Los Bulls sumaron esta última madrugada un nuevo triunfo a domicilio tras batir 95-102 a los Hornets en el Time Warner Cable Arena. Su décima victoria en 13 partidos a domicilio (el 76'9%). Son el mejor equipo de la Conferencia Este en cancha ajena, el cuarto mejor de la competición. Unos datos que contrastan con el balance negativo (2-4) que lucen en el United Center, su pabellón de Chicago. No sólo los Cavaliers y los Mavericks consiguieron asaltar su feudo en la prórroga, sino que también equipos con un potencial menor (Celtics y Pacers) se marcharon de la Windy City (Ciudad del Viento) con la victoria en el zurrón. Hasta la fecha, sólo han podido superar a Orlando y Detroit ante el calor de su público. Una tendencia que pueden empezar a revertir a partir de la madrugada del próximo sábado, cuando los de Thibodeau midan sus fuerzas con el actual mejor equipo de la Liga: los Golden State Warriors de Stephen Curry. Después llegarán los Nets (miércoles 10) y los Blazers (viernes 12).

Tres partidos espaciados para lo que es el apretado calendario de la NBA. Algo que seguramente agradecerán los de Illinois ya que en poco más de un mes de competición han disputado seis back to backs (dos partidos en dos días seguidos) con un récord igualado de victorias-derrotas: 6-6. Cuando la marca de los Bulls (cuartos en el Este) es de 12-7. No cabe duda que las continuas lesiones han supuesto una cuesta arriba en la trayectoria del equipo, aunque desde la franquicia no quieren excusas. "Esta es nuestra identidad. Cuando la adversidad nos golpea y las cosas se ponen complicadas conseguimos volver", explicaba Joakim Noah tras derrotar a Charlotte, un triunfo balsámico tras caer 24 horas ante Dallas en un doble tiempo extra al que se llegó tras una infantil personal de Hinrich y que obligó a Thibodeau a exprimir al máximo a muchos de sus hombres más importantes: Pau Gasol jugó 50 minutos, su mayor presencia sobre el parqué desde marzo de 2011.

Precisamente, el español (se perdió tres encuentros al inicio de una gira que les tuvo dos semanas fuera de Chicago) se ha destapado como el jugador que fue en Memphis y durante sus primeros años en los Lakers. Su rendimiento y adaptación está sorprendiendo a propios y extraños. Sus números e importancia en ancha así lo certifican: promedia 19,9 puntos, 11,4 rebotes y 1,9 tapones. Es más, con el de anoche son ya once los dobles-dobles que acumula este curso, los cinco últimos consecutivos. "Me encanta Pau. Todo lo que digas sobre él es poco. Hace una jugada buena tras otra. En el pasado ha sido criticado, pero es muy duro y eso es lo que me encanta de él", le alaba su técnico.

Pero no sólo el mayor de los Gasol está brillando en este arranque. Junto a él, y debido a la maltrecha rodilla izquierda de Noah y a las molestias físicas que Rose ha venido arrastrando, Jimmy Butler se ha destapado como el líder del equipo sobre la cancha. Tanto que ha sido designado mejor jugador de la Conferencia Este en el mes de noviembre. Valga un dato: en lo que llevamos de curso ha anotado 20 o más puntos en 12 partidos, tres más que en el acumulado a lo largo de sus tres primeras campañas.

Y, como indicaba en el párrafo anterior, hay que hacer referencia a Derrick Rose. Tras perderse ocho de los 13 primeros encuentros de su equipo, el base va recuperando poco a poco sensaciones para acumular seis duelos disputados de manera consecutiva. Esa es la buena noticia, parece haber tomado al fin la buena dirección para volver a ser el que fuera antes del calvario en las rodillas. Mientras tanto, a la espera de recuperar la confianza perdida, opta por protagonizar jugadas desde más allá del arco: en los 76 tiros de campo intentados en los cuatro últimos partidos, 39 han sido de tres puntos.

Y para concluir, cabe destacar el paso adelante dado por Nikola Mirotic. El ex del Real Madrid ha aprovechado a la perfección la ausencia de Taj Gibson por un esguince de tobillo. Ahora que la vuelta del ala-pívot está cerca, Niko volverá a ver reducidos sus minutos de juego. No obstante, puede hacerlo con la cabeza bien alta. Ha ganado esta primera batalla en la NBA. La gente en Chicago ya sabe de lo que es capaz. No en vano, es el único rookie en haber firmado ya tres doble-dobles. Y eso que es sólo el undécimo novato que más juega.