Bertans ha vuelto a lesionarse en el Bilbao. No tiene suerte el escolta letón: hizo 16 puntos en diez minutos ante el Madrid y puso los cimientos de un partido que se recordará durante años en Miribilla. Pero en la última entrada a canasta del segundo cuarto se volvió a romper. Nocioni le hizo una falta dura y se quedó en el suelo con las piernas encogidas. Sufrió una rotura miofascial de grado uno de la porción larga del músculo bíceps femoral de la pierna derecha. Lanzó los dos tiros libres y acabó su participación. La misma dolencia que el año pasado en el amistoso ante los Sixers y de este curso, que le obligó a parar. “Sabía por la sensación que era otra vez en el sitio de antes, intenté empezar el segundo tiempo, pero no pude”, señala el escolta letón con aire triste.

Por su parte, Dejan Todorovic sufre un esguince a nivel tibioperoneal en el tercio proximal con afectación de la membrana interósea de la pierna derecha. La evolución de la lesión en ese periodo de tiempo de baja marcará su regreso al trabajo junto al resto de la plantilla.

Bertans aboga por realizar un tratamiento diferente para curarse bien y del todo. “Era necesario y no lo lamento, jugar un partido así en Miribilla, por nuestra afición… fue increíble, es una pena que estuviera sólo diez minutos. Solo pensaba en el partido, si al final podíamos perder, no en si me había roto”. Sus lesiones siempre llegan en entradas a canasta (hasta el verano con los Celtics se dio un espectacular golpazo en una acción de esas y fue evacuado en camilla). Pero no va a renunciar a sus señas de identidad. “Es mi estilo de juego no voy a cambiar, no puedo ser un jugador que solo tire triples”, avanza. Dairis se ejercitó toda la semana con normalidad “y me encontraba bien”. Estaba ante el encuentro que siempre soñó::“Me sentía muy bien. No sé si era mi mejor partido aquí, porque sólo estuve diez minutos, si hubiese podido jugar 25 o 30 minutos…”.

Quino Colom, con su valentía, y su forma de anticipar los bloqueos atacando el espacio también fue decisivo ante el equipo de Laso.”Lo importante fue la victoria, la sensación que dio el equipo; los primeros 20 minutos fueron los mejores de largo de la temporada, con la intensidad que queríamos y se había perdido estas dos semanas. Ganar de 20 al Madrid en casa con toda la afición es una muestra de carácter y encima con la lesión de Daris y la expulsión de Axel (Hervelle) y Alex (Mumbrú)… aguantarles así con gente muy buena en la pista te aporta grandes sensaciones”.

El Bilbao se mantuvo en pie ante el subcampeón de Europa con Colom (que llega de un mal año), Borg (un crío que debuta en ACB), Andjusic (que bajó con el Valladolid el año pasado), Williams (renace tras una grave lesión y un año en blanco) y Todorovic (aún algo verde). Todo un grupo de colosos. “Tenemos un gran equipo y eso nos hace ganar partidos, hay buenos jugadores en todas las posiciones, si falta uno los demás tratar de suplir sus virtudes”, expone el que lleva la batuta, Colom.

Ya lo había sentido en otros partidos, pero el base andorrano pudo experimentar en plenitud el ‘efecto Miribilla’ como local: “Está muy bien, ante el Madrid la grada conectó en seguida, lo notamos y cuando se pusieron a ocho o nueve, fue un soplo más que nos vino estupendo”. Ahora les espera el Joventut: “Parece una locura su juego, pero la saben controlar bien. Su estilo es muy arriesgado”.