ANDORRA 70 - REAL MADRID 79

Rudy decide y el Madrid acaba con su mala racha en Liga

El conjunto blanco, que había perdido cuatro de sus últimos cinco partidos en competición nacional, ganó en Andorra. Tres triples consecutivos de Rudy, claves.

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El Clásico navideño había dejado mejores sensaciones al Barcelona que al Madrid. Pero siete días y tres partidos después, el equipo culé no fue capaz de volver a ganar, mientras que los de Laso estuvieron a punto de hacerlo en Málaga, sacaron adelante una cita durísima en Belgrado y ayer se sobrepusieron al cansancio para vencer a un buen Andorra. Hizo falta sufrimiento y la mejor versión de Rudy para que la expedición  blanca regresara a casa con alivio, rota esa racha de cuatro derrotas en los anteriores cinco duelos ligueros.

Amagó el Madrid con finiquitar rápido el encuentro con un 3-13 de salida impulsado por Rudy y Rivers. Pero reaccionó el Andorra de la mano de Gomes y Bogris, y un mate de David Navarro, lejos esta vez de parecerse al Navarro del Barça, culminó el 8-2 que metió a los locales en el partido (11-15). Los triples permitieron a los blancos mandar en los primeros 20 minutos (7/13 en ese tiempo), aunque la mayor frescura del conjunto del Principado propició que tuviera una efímera  ventaja (19-18, minuto 11).

Laso, que no pudo contar con Ayón por unas molestias del mexicano en el hombro izquierdo, se quedó sin Maciulis mediado el segundo cuarto por un encontronazo con la mole Jawai (unos 130 kilos), que le lastimó el hombro derecho. Mejri tuvo unos minutos de rehabilitación tanto en ataque (8 puntos seguidos) como en defensa. Eso, unido al acierto exterior de Nocioni y Llull, hizo que el Madrid se fuera al descanso con ventaja pese al empeño de Ivanov en impedirlo con dos triples (36-41).

Hubo un nuevo intento de despegue con Reyes al frente. Dos tiros libres del capitán pusieron la máxima visitante (+13, 40-53), pero la rotación era corta y el equipo se rompió. Nadie llegaba a los tiros exteriores y Bourousis y Mejri sufrían por dentro con Jawai. Schreiner encadenó 11 tantos seguidos y el marcador se apretó (51-54). Tocaba sufrir.

Peñarroya ordenó una zona que atascó el ataque madridista. Y a falta de Navarro, apareció Bivía para poner un incierto 62-62 a seis minutos del final. El partido parecía abocado a un thriller... hasta que apareció la infinita clase de Rudy. El mallorquín armó el brazo y descerrajó tres torpedos seguidos desde los 6,75 que cerraron una victoria extenuante del Madrid.