La carretera traía curvas, pero Madrid y Barça llegan vivos a la última vuelta. Duelo clásico, aunque no al sol, como les decíamos en la previa del torneo. Frío, lluvia en Gran Canaria y hasta un oleaje que echó el cierre a la zona de la afición en la playa de Las Canteras. Un tiempo de locos que ha descolocado a todos. La final, en cambio, no. El Madrid contra el Barça­ por quinta vez en seis años. Séptimo Clásico copero consecutivo (se han cruzado en todas las ediciones desde 2009) y la revancha de hace un año en Málaga, con aquel tiro icónico de Llull que marca una carrera: 77-76 y una décima en el reloj. “Me la volvería a jugar hoy”, por si alguien se lo preguntaba.

Batalla con poso histórico, con los azulgrana a un triunfo de cazar a su rival en el palmarés (24 a 23 ahora) y con los blancos a la misma distancia, a otro triunfo, de hilar dos títulos seguidos por primera vez en ¡29 años! (1985 y 86). Y todo con Pablo Laso y Xavi Pascual en los banquillos. Su presencia les ha revitalizado. Undécima final en tres temporadas y media para el vitoriano (seis títulos), y 18ª final consecutiva en competición nacional para el de Gavá. Seis seguidas ya en este torneo.

En lo que va de campaña, ya han cruzado armas tres veces y las que te rondaré morena: 2-1para los blancos. La última, hace 17 días en la Euroliga. Paliza (97-73) con truco. No estaban ni Navarro ni Oleson. El nacionalizado firmó ayer el demarraje ganador. Hay un Barça con y otro sin él. Aporta talento y precisión, eficacia cuando quema el balón. Y nervio atrás, donde más se aprecian las costuras de un equipo que ante el Unicaja cedió 16 rebotes defensivos. Si esconde ese zurcido, su talento habla. Como el del Madrid.

El Rey Felipe VI dará por primera vez el trofeo

Felipe VI presidirá esta tarde la final de la Copa de Las Palmas de Gran Canaria. Será la primera vez que acuda en calidad de Rey tras su proclamación el pasado 19 de junio, aunque no su primera aparición en un partido de baloncesto. Hoy será el encargado de entregarle el trofeo al campeón de esta 79 edición de la Copa del Rey, pero ya lo hizo en la final del Mundial el 14 de septiembre, cuando Estados Unidos batió a Serbia en el campeonato celebrado en España.