Las opciones de los Wizards de meterse en la final del Este podrían verse reducidas casi a cenizas. El motivo, las cinco fracturas no desplazadas que John Wall sufre en la mano y muñeca izquierdas. Tal y como anuncia la franquicia de Washington DC a través de un comunicado, el jugador sigue consultando con varios especialistas para determinar su tratamiento. Por el momento, se desconoce cuánto tiempo estará de baja y su estado de cara al tercer partido (se jugará en la madrugada del sábado al domingo) de la serie que enfrenta a los magos con los Hawks.

Wall ya fue baja durante el segundo partido de las semifinales, disputado en Atlanta, y que permitió a los de Budenholzer empatar a uno la eliminatoria. El playmaker de los Wizards se lesionó durante el primer duelo. Tras dejar una bandeja con la mano izquierda, se fue al suelo. Inmediatamente se quejó del dolor en dicha zona, aunque en un principio no pareció más de un mero golpe.

Ahora, Ramon Sessions (quien llegó a los capitalinos el pasado febrero) deberá asumir una importancia mucho mayor en los de Wittman. De hecho, fue el máximo anotador del Game 2. Pero, lo cierto es que en Washington dependen en exceso del que es sin ninguna duda su franchise player. Los de DC lucen un negativo récord de 10 victorias por 40 derrotas cada vez que Wall ha debido de ausentarse desde que fuera elegido con el número uno del draft 2010. Con 12,6 asistencias, está siendo de largo el mejor pasador de la postemporada.

Pero pese a que el base no pueda volver a estar más con el resto de sus compañeros durante este curso, en Washington no pierden la fe en el equipo. "De ninguna manera pensamos que la serie esté terminada. Queremos conseguir victorias por John", comentó el veterano Paul Pierce. Buena parte de las opciones van a pasar ahora tanto por sus manos como por las de Bradley Beal.