CSKA 68-OLYMPIACOS 70

Uno por uno del Olympiacos: Spanoulis, amo de la Final Four

El CSKA tuvo el partido ganado, nueve arriba (61-52) en el último cuarto, pero apareció Spanoulis para anotar ocho puntos en los últimos dos minutos. Dios griego.

Vangelis Mantzaris (7 de valoración): Escudero de lujo de Spanoulis, un currito abnegado con talento defensivo e inteligencia. Aportó 5 puntos y dio cuatro asistencias. Mejor siempre con él en la pista.

Vassilis Spanoulis (3): Nefasta primera parte, como ante el Madrid en la final de 2013. No metía una, literal (0 de 8, cuatro fallos de tres y otros cuatro de dos). Más tres pérdidas y dos tapones recibidos, aunque estaba atento en defensa y trataba de sacar del partido a De Colo. Aguardaba su oportunidad, ‘Spanoulis time’. Su equipo trabajó para llegar igualado al tramo vital. Entonces, daría lo mismo que hubiera firmado 0 de 11, porque en los dos últimos minutos se abrirían las aguas para hacerle paso. Ocho puntos en 120 segundos, tres canastones marcado de cerca, estrechamente, sin un pero. Spanoulis lo había vuelto a hacer. Ha ganado todos los partidos que ha jugado en la Final Four: siete de siete. Dios griego.

Tremmell Darden (-3): Cometió dos faltas en los primeros dos minutos y 36 segundos y se marchó al banco. Adiós partido para él.

Georgios Printezis (22): Desde el tiro ganador de 2012 lleva unas alitas imaginarias cosidas a la espalda que le hacen volar en estas batallas decisivas. Al descanso sumaba 11 puntos sin un fallo en el lanzamiento (15 de valoración). Clave para aguantar a su equipo a la espera de Spanoulis.

Bryant Dunston (9): Pocos números, enorme trabajo en defensa contra los gigantes rusos. Cada balón suelto lo tocaba; se lo quedaba o ayudaba a un compañero a atraparlo. El Olympiacos dominó el rebote (40 a 33) gracias a él y a Printezis.

Brent Petway (5): Otro de los estajanovistas del equipo. Doce minutos heroicos en esfuerzo e intensidad y además anotó un triple y dos tiros libres.

Othello Hunter (-1): Poca participación, aunque le dio para colgarse del aro tras cazar al vuelo un rebote ofensivo.

Ioannis Papapetrou (4): Pieza clave en el arranque del duelo. Entró tras la segunda falta de Darden y sujetó bien a Kirilenko. Al descanso, nueve puntos, cuando su media en la temporada era de 3,4. Un triple y mucha lucha bajo el aro. La aparición inopinada. Luego no fue lo mismo, pero sin esos primeros 20 minutos…

Kostas Sloukas (13): El aprendiz de Spanoulis. Le cubrió durante gran parte del encuentro, hasta que dejó al maestro hacer lo que aún solo él puede hacer. Firmó diez puntos vitales cuando eres capaz de dejar al rival en 68.

Dimitrios Agravanis (1): Con 20 años cumplidos en diciembre tuvo su oportunidad y no la desaprovechó. Le faltó meter alguna más bajo el aro, pero sacó nota embarrándose en la pelea.

Oliver Lafayette (1): Poca influencia en el juego, accesorio, aunque firmó el único triple que intentó.

Matt Lojeski (3): Lidió con Weems y en el choque físico perdió la batalla de inicio. Labores de intendencia, poco para su calidad. Poco tino.