La eliminatoria entre Golden State Warriors y Cleveland Cavaliers por el anillo de campeón de la NBA es el acontecimiento baloncestístico más esperado del año. La vuelta de LeBron James a su Ohio natal, el MVP de Stephen Curry, la gran temporada de la franquicia de Oakland, Kyrie Irving, Klay Thompson, dos entrenadores novatos como David Blatt y Steve Kerr... hay tanto bombo alrededor de las Finales que el precio de las entradas se ha triplicado con respecto a años anteriores.

Si adoran la NBA y quieren viajar al Oracle Arena de Oakland o al Quicken Loans Arena de Cleveland, preparen el bolsillo. El precio medio de los tickets para la gran final está por las nubes, especialmente en casa de los Warriors:

Según un estudio de TicketCity del que se hace eco CBS, una entrada para el primer partido cuesta 1.440 dólares, más del triple que el año pasado en el mismo encuentro del Miami Heat - San Antonio (401 dólares en Miami) y casi mil dólares más que el Spurs - Heat de 2013 en San Antonio (560). Para el segundo partido el precio es todavía mayor (1.565 dólares), mientras que los duelos en Cleveland son algo más baratos (1.164 el tercero y 1.138 el cuarto). Aún así, siguen siendo superiores al tercer y cuarto choque de las Finales de 2014 y 2013 (637 y 450 dólares).