A Turquía le bastó el primer cuarto para sentenciar a la anfitriona (11-31). Diez minutos en los que los de Ataman estuvieron tan inspirados que rozaron la perfección: 31 puntos con 11 de 13 en el tiro (Dixon falló un triple e Ilyasova una canasta de dos). En cambio, Alemania no tenía nada que ver con aquel equipo que puso a Serbia contra las cuerdas hace dos días desde la defensa. De destacar atrás a ser un auténtico coladero, sin ayudas ni intensidad. El acierto turco en triples (5 de 6) hizo el resto.

La entrada en pista del fichaje del CAI Robert Benzing maquilló algo el esperpéntico partido de los germanos. Seis puntos seguidos suyos —cuatro desde el tiro libre— y la sequía anotadora de Turquía, que se pasó cinco minutos en anotar, redujeron distancias (17-31), pero Alemania no era capaz de meterse en el partido y su continuidad en este Eurobasket se ponía muy cuesta arriba. Adiós al sueño olímpico para Nowitzki.

En el tercer asalto los jóvenes tomaron el mando. Schroder, bastante perdido en la primera mitad, se ponía las pilas y Alemania escalaba un Himalaya en el que oteaba al fondo ya la cima (38-48). Y todo sin Nowitzki (15 puntos, pero 3 de 10 en tiros de campo), a menos revoluciones que otros días y viéndolo todo desde el banquillo. Pero Turquía también presume de cantera. Cedi Osman (20 años) se convertía en el escudero de Erden y hacía daño con sus triples imposibles y sus penetraciones. Acabó como héroe turco con 17 puntos (14 tras el descanso).

De ahí que el partido más que un Alemania-Turquía pareciese un Schroder-Osman. Hasta que llegó Pleiss —castigado desde el primer cuarto— para firmar la jugada del partido. Tapón a Guler y a correr para capturar un rebote tras fallo de Schoder y anotar un 2+1. Alemania bajaba por primera vez de los diez (66-73) y se venía arriba. Muy arriba. Faltaban algo más de tres minutos y los de Fleming levantaban la cabeza, pero cuando tenían a Turquía ante las cuerdas dos fallos tontos (una entrada de Schoder que escupió el aro y un gancho de Pleiss) les sentenciaron (75-80).

Ahora estará pegada al televisor esta noche, pendiente de qué hagan Italia y España. La puerta a los octavos para Alemania están ahí: a falta de dos jornadas deberá ganar al que pierda esta noche. Turquía, en cambio, coge aire. Dos triunfos a falta de dos partidos y uno de ellos ante la cenicienta del grupo, Islandia.