¿El mejor triplista de la historia? Cada día que pasa parece más claro que lo es. Stephen Curry se sigue superando a sí mismo cada vez que salta al parqué y sus números de estos primeros diez partidos desde la línea de tres puntos no tienen comparación alguna ni en la NBA actual ni en los casi 70 años de la liga (desde que arrancó como BAA en 1946).

El base de los Golden State Warriors se coronó como el jugador que más triples había anotado en una temporada en 2013 (272 aciertos), superando los 269 lanzamientos que Ray Allen había puesto en la red en la 2005-2006. Desde entonces, el de Akron solo ha hecho que mejorar. El curso pasado superó, por un amplio margen (14), su antigua marca, situando el nuevo récord en 286, y en la presente campaña va camino de destrozar de tal manera ese registro que es posible que nadie vuelva a acercarse nunca: en los primeros diez partidos ha anotado la friolera de 52 triples (después de meterles ocho a los Timberwolves), una media de 5,2 aciertos por encuentro con la que, de seguir así, podría terminar la temporada con 426 canastas desde más allá del arco (140 más que el año pasado). Es tan de locos como suena.

Curry ha llevado el arma del tiro de tres puntos a un nivel nunca antes visto. Lanza desde cualquier posición, sobre bote o en situaciones de catch and shoot, desequilibrado y la línea de 7,25 metros es solo orientativa para él. Le da igual que sean 7,5, 7,75, 8... A sus 27 años, el MVP 2015 lleva 1.243 triples anotados (solo dos menos de los que su padre Dell encestó en toda su carrera), una marca que le sitúa en el puesto 43 de una lista histórica que comanda Ray Allen con 2.973 aciertos. La marca del ex de Bucks, Celtics y Heat parecía inalcanzable hasta que apareció el habilidoso base que tiene el mundo NBA a sus pies. Para hacernos una idea, lleva 12 triples más este curso que los Timberwolves como equipo, 10 más que los Grizzlies y 19 más que los Nets. Ha anotado tantos lanzamientos de tres puntos como los San Antonio Spurs en lo que va de temporada (con dos partidos más). Además, el de los Warriors está lanzando con unos porcentajes escandalosos para la barbaridad de tiros que intenta: 52-110, un 47% de eficacia ¡Y muchos son desde 8 metros!

De los jugadores actuales ninguno es capaz de aproximarse a su locura. El podio de la temporada lo completan Damian Lillard, con 35 aciertos, y Eric Gordon, con 26. Curry hace de todo sobre el parqué, pero si hay algo por lo que será recordado siempre es por su enorme facilidad para anotar desde la línea de tres puntos. ¿Seguirá con este ritmo infernal? Solo nos queda esperar. Los comentaristas de los Wolves se preguntaban ayer cuándo iban a poder empezar a llamar 'bandejas' a los triples del fenomenal base de los Warriors. En mi opinión, ya están tardando demasiado. Curry es un abusón, en el mejor sentido de la palabra.