Los San Antonio Spurs vencieron esta madrugada a los Philadelphia 76ers (92-83) con susto en los instantes finales tras un parcial 2-14 que situó a los Sixers 87-83 a tres minutos del final. Esa racha estuvo impulsada por Jahlil Okafor. El rookie continúa con su progresión en la NBA y ante dos de las torres con más calidad de la NBA, Aldridge y Duncan, cosechó 21 puntos y 12 rebotes. "Ellos van a jugar desde el primer minuto hasta el último con la misma calidad, el mismo ajetreo y la misma camaradería. Es realmente un homenaje al carácter de Brett Brown, que está haciendo un trabajo fantástico", piropeó Popovich a un equipo y a un técnico que sumaron su décima derrota de una campaña en la que aún no conocen la victoria.

Los texanos, al margen de conseguir el séptimo triunfo del curso, disfrutaron con una nueva exhibición de LaMarcus Aldridge. El ala-pívot hizo un doble-doble con 17 puntos y 19 rebotes. Además, la afición de los Spurs fue testigo de un acontecimiento histórico, pues Tim Duncan con sus cinco tapones se convirtió en el líder histórico de la franquicia en ese apartado con 2.955, uno más que los puestos por su excompañero David Robinson. Esa cifra también lo eleva al cuarto puesto de toda la NBA.