HEAT 96 - SIXERS 91

Los Sixers, al revés que los Warriors: pierden todo (0-14)

Philadelphia dominaba por 11 a 7 minutos del final (76-87), pero entonces encajó un parcial de 20-4. Dwyane Wade (27) ya está entre los 50 máximos anotadores de la historia.

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NBA

"Una muy, muy cruel derrota". Esas fueron las palabras que Brett Brown empleó para definir el partido que se les escapó a sus Sixers de las manos. Tras ir casi toda la noche por delante en el marcador, llegar a contar con una máxima renta de 17 puntos (la mayor en lo que va de curso para el equipo) y ponerse 11 arriba (76-87) tras un gran mate de Nerlens Noel (10-8) a 7:12 para la conclusión, Philadelphia acabó cediendo ante los Heat (96-91). Y es que estos Sixers son como los Warriors, pero justamente al revés. Mientras Golden State (14-0) está a dos triunfos de conseguir el mejor inicio de siempre en una temporada, los de 'Philly' (0-14) llevan camino de mejorar el 0-18 con el que los Nets abrieron el curso 2009-10. Para que se hagan una idea, la cuenta de Twitter de la franquicia no ha puesto un sólo mensaje de los dos últimos duelos disputados. Pensarán que así llueve menos.

"Cuando estás 10-15 puntos arriba en el marcador y sientes que estás controlando el partido, acabar perdiendo duele incluso un poco más", reconoció Noel. Y es que, al igual que el equipo, el pívot lleva sin saborear la miel de la victoria casi 8 meses. Los Sixers, 3 veces campeones de la NBA, cosecharon su último triunfo el pasado 27 de marzo. Desde entonces, incluyendo los últimos 10 partidos de la pasada liga regular, acumulan nada más y nada menos que 24 encuentros cayendo de manera consecutiva. Otro dato negativo que les sitúa cerca, muy cerca, de hacer historia negativa en la NBA. Hasta la fecha, la mayor racha de derrotas seguidas la comparten los propios Sixers 2013-14 (el plan de Sam Hinkie puede resultar muy exitoso en un futuro, pero no habrá quien olvide estos años de purgatorio por las catacumbas como cual moribundo) y los Cavs post-LeBron, los de la campaña 2010-11.

Y esto, todo hay que decirlo, pese a que tras hacer el ridículo 24 horas antes en Charlotte ante los Hornets, el equipo dio la talla y jugó en Miami (8-4 para los de Spoelstra) uno de sus mejores partidos del año. Jahlil Okafor rindió con 16 tantos y 11 rechaces en la pintura pese a que tuvo que lidiar con una bestia llamada Hassan Whiteside (13-9 y 8 tapones). Mientras que desde el banquillo Robert Covington (21) e Isaiah Canaan (22) fueron los encargados de anotar. Pero enfrente tenían a un grupo mucho más experimentado que olió la debilidad mental de los imberbes pupilos de Brown. Justise Winslow, un rookie, sacó tajada de las pérdidas rivales para liderar una remontada que concretó Bosh con un triple poniendo el empate a 89 en el marcador. Ya era cuestión de tiempo que los Sixers acabaran bajando los brazos.

Wade, en el Top-50 de anotadores

Pero el que los Heat llegaran con vida al último cuarto se lo deben a Dwyane Wade. 'Flash' anotó 25 de sus 27 tantos en los tres primeros periodos. Una cifra que le permite situarse como el 49º mejor anotador de todos los tiempos (19.017 puntos) tras dejar atrás a Dale Ellis (19.004) y Reggie Theus (19.015). El escolta lo celebró con elegancia, alabando el trabajo y esfuerzo de su rival: "Son un equipo NBA. Tienen a chicos capaces de jugar al baloncesto". Aunque eso sí, no podía permitir una derrota de los de Florida: "No son mejores que nosotros y menos en nuestra casa". Ya lo ven, nadie quiere ostentar el dudoso honor de ser la primera víctima de estos Sixers. Igual que sucede con los invictos Warriors, pero al revés.