Ahora sí que dan miedo... Con el mejor Kyrie Irving, los Cleveland Cavaliers (24-9) vuelven a dominar partidos a su antojo, y sin que LeBron James tenga que ponerse el traje de superhéroe día sí y día también. Con el triunfo de ayer en Washington, los de Ohio suman seis victorias en siete partidos con su base titular sobre el parqué (solo han perdido con los Warriors). Y es que Irving es de esos jugadores que le cambian la cara a un equipo de la noche a la mañana. El point guard, un mago con el balón y siempre letal en las penetraciones, no ha tardado en coger ritmo de competición. Tras anotar 25 puntos en 28 minutos ante los Raptors, ayer destapó el tarro de las esencias para volver locos a los Wizards en el cuarto cuarto: 21 de sus 32 puntos llegaron en los 12 últimos minutos, un auténtico recital con el que LeBron disfrutó de lo lindo. "All Star automático", dijo la estrella de Akron sobre su compañero.

Irving se juntó con LeBron y con J.R Smith para anotar 91 de los 121 puntos de los visitantes. El cuatro veces MVP sumó +30 en los tres primeros cuartos por primera vez en lo que va de campaña (ESPN Stats&Info) y Smith, que venía de clavar ocho triples para 24 tantos contra Toronto, aportó otros cinco aciertos desde más allá del arco y un total de 25 puntos. A ver quién para a estos ahora, parecía pensar John Wall mientras anotaba un par de triples sin oposición con el partido sentenciado. El base de los locales se fue hasta los 20 puntos y repartió 12 pases de canasta.