El Dominion Bilbao lo volvió a hacer. Otra victoria fuera, en una pista complicada como el Nou Congost. Sin el cinco (lesionado Begic), y con su gran cerebro (Raúl López) saliendo de una sobrecarga en la rodilla. Lleva un 11-3 este año a domicilio entre ACB y Eurocopa. Échale un galgo. Resulta que su talón de Aquiles está en casa: 6-8, algo inaudito, porque Miribilla ha sido siempre el infierno donde quema a los rivales. Se presiona tanto para hacerlo bien y a veces lo ve tan encarrilado  que se le están subiendo a la chepa. Las cuentas son claras: si gana el domingo al Obradoiro y pierden Unicaja en la pista del Madrid o/y Andorra en Vitoria, estará en febrero en A Coruña. 

"Sabemos lo importante que es el partido del domingo. Todos, jugadores, técnicos, periodistas, afición... el partido del Obradoiro es la primera final del año -sostiene Hervelle-. Últimamente en casa no rematamos los partidos y cuando tenemos una ventaja cómoda no podemos permitirnos el lujo de dejar al contrario volver y ganarnos, tenemos que estar muy concentrados para rematar esos encuentros". Ante el Manresa el equipo dio otra de sus clásicas muestras de entereza (Aboubacar, que podía dar un respiro en los entrenamientos en el cinco por el lesionado Begic  está en camino a abandonar Bizkaia por tener que renovar sus papeles de residencia y ante la falta de dinero para hacerle ficha profesional tanto Bilbao como Zornotza). A este respecto, Hervelle hizo esta lectura: "Fue un partido difícil porque el Manresa está muy bien entrenado, tiene un juego interior muy poderoso, saben a lo que juegan y la afición que aprieta mucho. Jugamos a un alto nivel, gestionamos bien el tiempo y las jugadas, aunque cometimos errores".

Y se ganó sin el techo del equipo. sin Begic "que sabemos lo importante que es". "Cada jugador aportó lo que debía para cubrir esa baja. La gestión del entrenador fue casi perfecta, cubrió la baja sin que se apreciara mucho, con Mendia y decisiones técnicas acertadas los 40 minutos", prosiguió el pívot belga, que sale de un tiempo de baja por un hematoma en el costado y está alternando el cuatro y el cinco ante la baja del esloveno: "No estoy satisfecho de mi rendimiento, pero cada partido me siento más cómodo a nivel físico. Aún no ando bien del todo, pero estoy encantado de poder ayudar al equipo y jugar". 

Miribilla recibe el miércoles al Bayern en busca de enderezar el rumbo en Europa, alterado por otro de esos partidos raros perdidos, ante el Banvit: "Puede ser que juguemos algo atenazados. Por querer hacer las cosas demasiado bien, porque sabemos lo importante que es para nuestros seguidores ganar en casa. Con el calendario ya no hay otra presión más importante que la del resultado de tener que ganar al Obradoiro. El Bayern es un equipazo, con un gran presupuesto de Euroliga, jugadores de alto nivel y un gran entrenador".