DENVER NUGGETS 115-CHICAGO BULLS 110

Alarma en los Bulls de Gasol: lesión en la rodilla de Butler

El escolta tuvo que retirarse en el segundo cuarto de la derrota ante los Nuggets. El internacional español no jugó por un esguince en la mano.

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Dunleavy, Noah y Mirotic eran las conocidas bajas de los Bulls cuando aterrizaron en Denver, y a última hora, se sumó Pau Gasol. El internacional español arrastraba molestias en la mano izquierda (esguince) y después del partido ante Sacramento Kings, Hoiberg decidió darle descanso. Apuesta arriesgada viendo como llegaba el equipo de Chicago a Colorado con 9 derrotas en los 15 encuentros previos y empate técnico con Miami Heat en la quinta plaza del Este. Mal momento para perder soldados. Pero como se dice, todo puede ir a peor y así fue. 

Corría el segundo cuarto. Los Bulls resistían el terremoto Gallinari (17 puntos a falta de 1:10 para el descanso, 33 al final) parapetados en Rose y Butler, cuando el escolta se lanzó hacia la canasta contraria. Joffrey Lauvergne esperaba en la zona y con el choque y la posterior caída, Butler quedó fulminado. La rodilla izquierda dijo basta (esguince). La misma que le mantuvo inactivo durante el duelo en Sacramento frente a los Kings por una tendinitis que sufrió en un choque en Utah. Estaba tocada y en ese desafortunado lance se rindió. El dolor del actual macho alfa de los Bulls era visual y auditivo, y no tenía muy buena pinta. Butler logró lanzar los tiros libres de la falta, pero tuvo que retirarse de la pista en una especia de silla de ruedas. Según Rose, Butler oyó como un estallido en su rodilla.

Las noticias que llegan, de todas formas, son positivas a la espera de la resonancia magnética a la que será sometido, si no hay cambios, en Minneapolis. Esa prueba revelará cuál es el alcance definitivo de la lesión, aunque los ligamentos no están afectados. Es segura su baja ante los Minnesota Timberwolves, pero podría volver el lunes en Charlotte o el miércoles frente a los Hawks. La clave es su regreso en Cleveland (jueves 18). En un principio, estará en el All Star Game. Pero sea el tiempo que sea, la baja de Butler es una tragedia por el momento que pasan los Bulls. Su estancia en el dique seco provocará la vuelta de Gasol contra los Wolves de Ricky Rubio, un duelo en el que Dunleavy podría debutar esta temporada, una vez recuperado de los problemas de espalda que lo llevaron al quirófano.

Y sus vueltas son indispensables para encauzar la dirección de un equipo demasiado dado al zigzagueo y que desconoce cuando tiempo estará sin Butler. La ausencia del ala-pívot español dio la oportunidad a Cameron Bairstow de ser titular por segunda vez en su carrera y se le notaron las costuras. Faried (11 puntos y 11 rebotes) y Jokic (14 y 12), cada noche crece un poco más, no se sintieron demasiado intimidados por el australiano y el rookie Portis acabó jugando más minutos que él, aunque sólo el batallador Taj Gibson (18, 7 y 3 tapones) tuvo una verdadera capacidad de intimidación. Pero a pesar de las deficiencias en el quinteto titular y en la rotación, los Bulls lanzaron buenas andanadas en Colorado.

Con un Rose omnipresente (30 tantos), los chicos de Hoiberg comenzaron el último cuarto 16 arriba (73-89). Pero la gasolina tenía un límite y se gastó durante esos 12 minutos finales.  El equipo de Michael Malone endosó 42 tantos en el cuarto cuarto, con Gallinari dando la vuelta al marcador cuando sólo quedaba un minuto de juego (109-108). Un tiro libre de Mudiay y una canasta de Faried al recoger el segundo lanzamiento del base, dieron la victoria a la franquicia de Colorado, la tercera en los últimos cinco partidos. Mientras, los Bulls ya son sextos y el pozo se hace cada jornada más profundo y oscuro debajo de ellos.