El estreno en los Playoffs de los Warriors del 73-9 no tuvo demasiada historia en cuanto al juego por la tremenda superioridad de los vigentes campeones sobre unos Rockets que huelen a 4-0 en contra. Pero la actuación de este equipazo, el del récord de victorias en temporada regular no dejó indiferente a nadie, por la bendita culpa de Stephen Curry. El MVP se salió en la primera mitad con 24 puntos (5/7 en triples), y eso que Patrick Beverley trató de pararle con cierta violencia, lo que provocó un enganchón entre los dos que no fue a mayores. Pero poco antes del descanso se torció el tobillo derecho (ver vídeo). A la vuelta jugó un par de minutos pero sintió molestias y volvió a retirarse al locker room.

Todas las alarmas saltaron en el Oracle Arena. Todo Oakland se estremeció ante la posibilidad de que se reprodujeran los problemas en los tobillos que lastraron el principio de la carrera del genio de Akron. Los Warriors, que iban ganando por 29 puntos (63-34) pasaron unos minutos en estado de shock, momentos de zozobra que Houston aprovechó para reducir tímidamente la diferencia. Pero el rumor de que Curry estaba disponible para jugar si era necesario corrió como la pólvora para tranquilidad de compañeros, técnicos, directivos, aficionados... hasta del presidente Barack Obama, que tanto admira al jugador. No hizo falta que el astro volviera porque Golden State administró su ventaja con los puntos de Thompson, Speights, Green, Barbosa, Livingston, Ezeli... Todos arrimaron el hombro para suplir la ausencia de su líder que es duda para el segundo partido. Un equipazo.

En los Rockets decepcionó un poco Harden, quizá desmotivado ante la falta de Curry, y Howard lo intentó en la pintura, pero a su equipo le caían tantos por todos los lados, en lanzamientos, penetraciones, contraataques. Y los texanos se fueron del partido con una preocupación: si con medio Curry los Warriors ganaron por 26 casi sin despeinarse, que ocurrirá cuando el MVP vuelva al cien por cien y juegue más minutos (habrá que esperar para conocer su estado). ¿Una carnicería? Veremos. Lo que sí parece por lo visto esta noche, es que la serie será tensa entre dos equipos que no se caen bien.