Si el Barcelona quiere estar en la Final Four de Berlín deberá volver a ganar en la pista del Lokomotiv Kuban, en Krasnodar después de que el equipo de Giorgios Bartzokas, contra todo pronóstico, haya vencido este jueves en el Palau Blaugrana tras una prórroga (80-92), en la que los hombres de Xavi Pascual han encajado un parcial de 4-16 en cinco minutos.

Tras bloquear el tiro exterior azulgrana con una defensa muy agresiva, el equipo ruso lanzó sobre la defensa barcelonista a un extraordinario Anthony Randolph (28 puntos y 7 rebotes), Chris Singleton (14 y 7) y Víctor Claver (17 y 10). Ahí, el Barcelona, con Lawal y Dorsey lesionados, solo pudo responder con Tomic (18 puntos y 6 rebotes) y Samuels (4 puntos y 5 rebotes); es decir 59 puntos y 27 rebotes frente a 22 y 11 en el juego interior. Sólo Juan Carlos Navarro, sacando fuerzas de nadie sabe dónde, tiro de su equipo (19 puntos y 5 asistencias), pero los errores desde la línea de 6,75 (6 de 28, solo el 21 por ciento de acierto), acabaron de condenar al irregular equipo de Xavi Pascual.

El Barcelona cometió un error imperdonable de salida: no marcar el ritmo del partido y permitir al Lokomotiv imponer una lentitud exasperante y, con alguna permisividad arbitral, mostrarse tremendamente agresivo en defensa, bloqueando las acciones interiores barcelonistas. Esto permitió a los visitantes por medio de los omnipresentes Malcom Delaney y Anrhony Randolph, apoyados por un efectivo Víctor Claver abrir ya una ligera brecha en el electrónico (8-14, m.6), obligando a Xavi Pascual a pedir su primer tiempo.

Juan Carlos Navarro, como siempre se cargó al equipo a sus espaldas y junto a Satoransky y Perperoglou cortaron la efectividad visitante al final de primer cuarto (19-21). Delaney, con dos faltas, dejaba su puesto a Dontaye Draper al inicio del segundo cuarto y Satoransky, también con dos faltas, a Carlos Arroyo, aunque Bartzokas arriesgaba y colocaba en pista a otro pívot, Chris Singleton en apoyo de Randolph y Claver en la pintura.

Un parcial de 6-0, con triples de Doellman y Abrines, parecía aclarar el horizonte para los barcelonistas (25-21, m.12), pero Singleton, ante un Tomic lento en el repliegue y Samuels aún más, lanzaba a su equipo a un parcial de 2-10 (27-32, m.15).

Navarro volvió a acelerar el partido y equilibrar el marcador (35-35, m.19), pero una canasta de Draper y un 2+1 de Claver cerraban el encuentro al descanso con un sorprendente 35-40.

Los de Xavi Pascual no estaban cómodos en la pista y la dura defensa de ayudas frenaba la ofensiva local. Mientra Delany y Randolph llevaban a su equipo a su máxima ventaja (40-47, m.24). De nuevo Navarro, ahora apoyado por Abrines, asumía la responsabilidad del ataque catalán y remontaba con un triple al final del tercer cuarto (54-51).

Un triple de Claver igualaba el partido al inicio del último cuarto (54-54), pero Doellman y Samuels devolvían el mando al Barcelona (60-56, m.33). Randolph se quedaba en el banco y Singleton ocupaba su lugar de salida. Cinco puntos suyos y dos más de Delaney obligaban a un nuevo tiempo de Pascual (60-65, m.34).

Randolph volvía a pista para acompañar a Singleton y el Lokomotiv aguantaba su ventaja (65-71, m.39), pero Tomic se convertía en una pesadilla el aro rival y reducía las diferencias al mínimo (72-73) a 14 segundos del final.

A partir de ahí ambos equipos iban a la línea de tiros libres por faltas hasta que Randolph falló uno de los suyos (74-76) a 12 segundos para el final y en la siguiente acción, Navarro empataba (76-76) a tres segundos para el final entre el delirio de una afición que enloquecía, Delaney efectuó el postrer lanzamiento de su equipo, pero falló.

El Lokomotiv había perdido a Singleton por cinco faltas y en el inicio de la prórroga el Barcelona fallaba en el tiro exterior mientras que Randolph pulverizaba la defensa la defensa azulgrana con diez puntos seguidos (dos triples incluidos) (78-89, m.44). El 80-92 final quizás reflejaba los muchos errores del Barcelona esta noche, porque un parcial de 4-16 en una prórroga no es algo. normal