LOKOMOTIV 81 - 67 BARCELONA (3-2)

El Lokomotiv de Claver deja al Barcelona fuera de la Final Four

El español disputará su primera Final a Cuatro con un equipo que firmó un parcial de 23-5 en el último cuarto. Singleton fue el verdugo azulgrana
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Quizás ha sido el peor último cuarto del Barcelona en toda la Euroliga. Cncajando un parcial de 23-5, el equipo azulgrana ha dicho adiós por segundo año consecutivo a la Final Four, cayendo con toda justicia en la pista del Lokomotiv Kuban de Víctor Claver por 81-67. La impotencia, la falta de continuidad y las lagunas defensivas del equipo de Xavi Pascual, que este martes ha vuelto a mostrar su peor cara, con una irregularidad inquietante en su juego, le ha llevado al desastre ante un rival que en su segunda Euroliga ha logrado llegar a la Final Four con merecimiento, por mostrar más orgullo que los azulgranas, demasiado intermitentes en toda la temporada.

Con menos recursos que el Barcelona, Giorgios Bartzokas, que ya ganó la Euroliga con Olympiacos, ha hecho creer a sus jugadores que podían ganar. Incluso tras un tercer cuarto desastroso (8-23) les ha hecho emerger. Si Anthony Randolph, que jugó mermado, llevó al milagro en Barcelona con diez puntos en tres minutos de la prórroga para el 80-92 final, este martes ha sido Chris Singleton, con 11 puntos en los cinco primeros minutos del último cuarto el que ha sentenciado al Barcelona.

Ni los revulsivos de Dorsey y Lawal (2 puntos y 3 rebotes entre ambos) sirvieron para nada. Sólo Juan Carlos Navarro y Stratos Perperoglou, desaparecidos en el último cuarto, han pasado de los diez puntos. Delante, Delaney en su línea (17 puntos y 6 asistencias), Singleton, demoledor (16 puntos y 12 rebotes) y Ryan Broekhoff, letal con 4 de 6 triples para 14 puntos, han llevado a su equipo a su sueño: la Final Four.

Xavi Pascual se lo jugó el todo por el todo, dando entrada a Shane Lawal y Joey Dorsey en la convocatoria. Después demostrarían que están lejos de si forma, pero lo que no esperaba es la salida relámpago de Lokomotiv con un parcial de 15-7 en apenas cuatro minutos, sin fallo de los rusos (3 de 3 en triples y 2 de 2 de dos), que desarboló la defensa azulgrana. En cambio, la de ayudas alternando zona-individual de Bartzokas no dejaba maniobrar al ataque azulgrana.

Estaba claro que el Lokomotiv no podía seguir con ese porcentaje increíble de efectividad. Tomic con dos faltas, ambas en ataque, era relevado por Dorsey y un nuevo triple local, ahora de Voronov, que tomaba el relevo de Broekhoff (2 de 2), dejaba el marcador en 22-16 (minuto 8). Xavi Pascual iniciaba las rotaciones, entrando Abrines y Oleson y el ya referido Dorsey, cortando la racha local y siendo Abrines el que recortaba al final del período (26-21).

Consciente de lo mucho que estaba en juego, Bartzokas iniciaba el segundo cuarto dejando en el banquillo a Broekhoff, Delaney, Claver y Randolph y su segunda unidad, con Draper y Singleton como referentes, veía una salida fulgurante del Barcelona, con Arroyo de base, que daba la vuelta al marcador con un parcial de 0-7 (26-28) tras un triple de Oleson.

Dorsey cometía falta antideportiva y era relevado por Lawal, el Lokomotiv cambiaba su sistema de ataque volviéndose más incisivo para endosarle, a base de tiros libres y canastas interiores un parcial de 9-0 (35-28, m.15), obligando a Pascual a pedir tiempo.

Navarro, Satoransky y, por vez primera, Ribas entraban en juego, pero Bartzokas respondía con el retorno de Delaney y Broekhoff. Y ambos, con sendos triples y una canasta de Singleton, lograban la máxima ventaja local (47-36, min. 19). Sin Randolph en pista, sólo 44 segundos de este cuarto, Delaney cerraba con un triple el marcador al descanso (50-39).

Cuando parecía que el Barcelona estaba herido de muerte, resurgió tras el descanso y lo hizo a base de triples. Dos de Navarro y otro de Satoransky recortaban con un parcial de 0-9 (50-48, minuto 23). Tomic empezó a dominar en la zona rival y lograba el empate (57-57, minuto 27). Sin acierto en ataque, el Barcelona pasó a dominar y dos tiros libres de Navarro y un triple de Perperoglou le daban la máxima ventaja a los azulgrana (57-62, min. 29). El parcial del tercer cuarto fue demoledor (8-23).

Una canasta de Abrines mantenía la diferencia al inicio del último cuarto (59-65) y nadie podía esperar lo que iba a suceder a continuación, y más sin Randolph en la pista, quizás 'tocado', sólo entró en los tres minutos finales. Y fue Chris Singleton. Un jugador que llegó a Rusia tras tres temporadas en la NBA (Washington), otra en China y otra en la liga de desarrollo estadounidense (Oklahoma).  Singleton desató una 'tormenta' en el aro azulgrana. Dos triples, un 2+1 y una canasta, para 11 puntos en apenas cinco minutos, junto a un triple de Matt Janning, otro de los destacados, cerraba un parcial de 14-0 para dejar el marcador en 73-64 a cinco minutos para el final del choque.

Xavi Pascual ya no tenía recursos. Había pedido tiempo con 62-64, había devuelto a pista a Navarro, Satoransky y Perperoglou con 68-64 y devuelto a Oleson a pista ante un descentrado Ribas (73-64), pidiendo un nuevo tiempo e inútil tiempo muerto; su equipo se había ido abajo moralmente en ataque y defensa.

A partir de ahí el Barcelona se lanzó a la desesperada, pero los triples ya no entraban y un triple final de Malcom Delaney, el alma del Lokomotiv sentenciaba el 81-67 final tras un parcial de 23-5 en este último cuarto, con una sola canasta del Barcelona, y el adiós por segundo año consecutivo del equipo azulgrana a la Final Four.