"No sé cuál es realmente mi edad, no puedo decir cuál es la verdadera. Mi mamá siempre me dijo diferentes años. No podía recordar cuando nací". Con estas palabras dichas al canal CBC, Jonathan Nicola escribe otro capítulo más de una rocambolesca historia que fue desvelada hace menos de una semana en Canadá.

Nicola fue detenido el pasado 22 de abril por la Agencia de Servicios Fronterizos por infringir las leyes migratorias del país norteamericano. El sursudanés jugaba en el instituto Católico Central de Windsor-Essex (Ontario) con una documentación en la que se indicaba que tenía 17 años, cuando en verdad tenía casi 30. La verdad fue descubierta cuando Nicola viajó a la vecina Michigan. Sus huellas dactilares ya habían sido registradas por un viaje previo y mostraban una contradicción de casi 12 años. Su pasaporte indicaba que su fecha de nacimiento era el 25 de noviembre de 1998, pero el registro señalaba que había nacido el 1 de noviembre de 1986.

"Yo no vine aquí para dañar a nadie o para hacer algo malo. Todo mi objetivo es estudiar y obtener una educación con la que volver a casa y así ayudar a mi madre y al resto de mi familia", continuó Nicola que según informa el Windsor Star permanece encarcelado hasta al menos el 24 de mayo, debido a que las autoridades canadienses le consideran un riesgo de fuga. El que también habló fue su entrenador, Peter Cusumano: "Todo el mundo tenía sus sospechas (sobre su edad). Pero él tenía todas las respuestas correctas. Llegó con mucha más documentación que otros muchos niños que llegan".