El Montakit Fuenlabrada tiene ya pie y medio en el playoff después de ganar este domingo al Movistar Estudiantes en un último cuarto magnífico, donde remontó de la mano de Popovic y Stevic. El equipo colegial ganaba por siete puntos tras un tiro libre de Salgado a algo menos de 9 minutos para el final (58-51), pero ahí se le apagaron las luces y el Fuenla logró un parcial de 2-10 para ponerse por delante después de un triple de Úriz (60-61). En ese periodo fueron decisivos los 11 puntos de Stevic y la calidad y el control de un Popovic en gran momento de forma (22 al final), que mató el partido con un par de entradas poderosas y unos cuantos tiros libres. Poder balcánico para los de Cuspinera, que desde ese 58-51 firmaron un 16-29 demoledor. Así se frustró el buen debut de Levon Kendall en el Estu (12 puntos, 8 rebotes y 17 de valoración).

El Fuenla hoy por hoy es un equipo cuajado y en estado de gracia. Tabu fue baja de última hora por un problema muscular y el bloque no se resintió descompuso. Mientras que el Estudiantes, que no pudo contar con Nacho Martín (lesionado), aún intenta que empaste su mejorada plantilla, pero se le acaba el tiempo. Le quedan cuatro partidos (el último ante un casi descendido Gipuzkoa) para intentar ganarle el pulso por la salvación al Obradoiro. El derbi madrileño era muy importante para su futuro inmediato y compitió bien durante algo más de tres cuartos, con Salgado inspirado en la dirección, Bircevic, Pumprla y el citado Kendall en buena línea, y un trabajo defensivo notable.

Quizá le pesó el mal inicio de Laprovittola (4/12 en triples) y más aportación de un Juancho Hernangómez que sigue jugando muy poco, aunque sea capaz de meter sobrado un mate en alley-oop. Puede que le distraiga ese draft de la NBA en el que se ha inscrito. Tampoco le vino bien el papel intrascendente de Brizuela y Simpson. Aún así, al conjunto de Valdeolmillos le dio para irse con siete de ventaja al descanso con un triple sobre la bocina de Laprovittola (42-35). La profesionalidad de un Álex Urtasun que domina con solvencia el catch and shoot (coger y tirar) impidió un mayor despegue local. Paunic, en un rol más de equipo, ayudó mucho en los rebotes (7).

En el tercer cuarto también dominaron los colegiales, pero el Fuenla es un equipo terco, un dolor de muelas que nunca se va de los partidos y eso le hace muy peligroso. Aguantó con un marcador corto a la espera de dar el golpe definitivo en los últimos minutos, y con ese ratito letal de Popovic y Stevic se llevó un triunfo que le deja séptimo en la tabla con una victoria de ventaja sobre el octavo (Bilbao) y dos sobre el noveno y el décimo (Murcia y Tenerife).