A la espera de medirse por primera vez esta noche (21:30) a los Blazers, Golden State ha mostrado un buen nivel en estos Playoffs. Aunque Stephen Curry no puede decir lo mismo. El base apenas disputó 39 minutos repartidos en dos encuentros ante los Rockets. Primero fue un esguince en el tobillo derecho. Después, otro esguince de grado uno en la rodilla derecha. Un "desafortunado resbalón" que le hizo incluso llorar tras conocer que no podría regresar en aquel cuarto encuentro de la eliminatoria de primera ronda. Nos remontamos al pasado domingo 24 de abril. Poco después, las informaciones que llegaban de Oakland fijaron en un plazo de dos semanas el periodo que permanecería de baja. Con el calendario en la mano, y siguiendo este pronóstico, habría que situar su regreso para el cuarto partido (en la madrugada del lunes al martes a las 4:30 hora española).

No obstante, el constante trabajo que está realizando (se está tratando tanto la lesión en la rodilla como la del tobillo) y las ganas por volver del jugador, podrían adelantar la fecha prevista para su retorno. "No le descarto aún para este martes (4:30 de la madrugada del miércoles 4 en España), aunque obviamente se trata de una posibilidad muy pequeña", comenta el mísmisimo entrenador de los Warriors, Steve Kerr. Unas opciones que podrían aumentar en el caso de un tropiezo de los califronianos este domingo en el primer asalto ante la franquicia de Oregón. Pase lo que pase, este comentario hace que se refuerce el optimismo en torno al que en los próximos días será nombrado de manera oficial MVP de la temporada por segunda vez.