WARRIORS 118 - BLAZERS 106 (1-0)

Klay (37) hace de Curry y Green, todo lo demás: 1-0 Warriors

Los de Oakland pasaron por encima de los Blazers sin demasiados problemas. El primer cuarto, un escándalo: 37-17. Lillard y McCollum, horribles.

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Fácil. Muy fácil. Un paseo por La Bahía y primer triunfo en las semifinales de conferencia para los vigentes campeones. Sin Stephen Curry, con americana azul y buenas sensaciones de cara a un posible regreso en el tercer partido, los Golden State Warriors volvieron a demostrar que no hay MVP-dependencia, al menos por ahora. Un soberbio Klay Thompson (37+5+5, career high, de récord y... ¡otra vez siete triples!), que mejoró él solo a los Blazers en el primer cuarto (18-17), hizo las veces de jugador franquicia mientras Draymond Green y Andrew Bogut se encargaban de todo lo demás. Fácil. Muy fácil.

Quizás no hemos hecho suficiente hincapié en lo buenos que son Klay Thompson y Draymond Green (triple-doble: 23+13+11). O quizás sí. Son buenísimos: dos superestrellas de la Liga que viven, sin problema alguno, bajo la alargada sombra de Curry, pero que siempre aparecen cuando su equipo los necesita. El partido del escolta fue tremendo, y sus primeros 12 minutos, sublimes: 10 puntos de salida, 18 totales y cuatro aciertos desde el triple. La grada, entregada. Sus siete triples finales le colocan como el jugador que más ha anotado en un periodo de tres partidos de playoffs en la historia de la NBA: 21.

Bogut, que no se anda con chiquitas, le colocó un gorro a Plumlee que llevaba escrito un mensaje claro: por aquí no... La tercera del australiano pudo abrir una puerta a los visitantes, pero entonces apareció Green, cual portero de discoteca en un mal día: ni una canasta fácil. Al descanso, 14 arriba los Warriors y una línea estadística de locos para el ala-pívot: 12 puntos, ocho rebotes, cinco asistencias, dos tapones, un robo y un +20 en sus 19 minutos sobre el parqué. Lo hace todo bien.

Y aún apretaron más los locales en las salida de vestuarios (hasta el 77-55). Aminu tiró de los Blazers a su manera (entre canastones y casi air balls) mientras Lillard y McCollum erraban un lanzamiento tras otro. El base, anulado durante gran parte del choque, despertó en el último cuarto, pero ya era demasiado tarde. Rifirrafe entre Varejao y Henderson (los dos expulsados), intercambio de canastas y, con un poco de maquillaje, hasta el martes. Los Blazers van a necesitar mucho más acierto de sus puntales si quieren tener alguna opción de robar un punto clave en el Oracle. Los Warriors, repetir una primera parte genial en la que se fueron hasta los 65 puntos sin el mejor anotador de la competición sobre la madera. Qué barbaridad de equipo. ¿Qué harían los Cavs sin LeBron, los Spurs sin Kawhi o los Thunder sin Durant? Fácil. Muy fácil.