¿Qué ha sido del All Star? Es la misma pregunta que pasará por la cabeza del propio Kyle Lowry una y otra vez. El base, que cuajó una gran primera parte de la temporada, lleva meses con porcentajes desastrosos, pero parece haber dejado lo peor para el final: nadie ha tirado peor en 50 años de NBA (Elias Sports Bureau). "Sé que soy mejor que esto", decía un cabizbajo Lowry después de fallar sus seis intentos desde la línea de tres (sin contar el Hail Mary, claro) en la derrota de los Raptors ante los Heat. El base, que acabó con 7 puntos, está lanzando con un 30,6% de acierto en tiros de campo y con solo un 16% en los triples: los peores porcentajes de los últimos 50 años en playoffs para un jugador con más de 100 lanzamientos. Casi nada.

Así, y para intentar dejar atrás sus problemas con el tiro, Lowry decidió que era el momento de hacer horas extra. Tras el partido, con las gradas del Air Canada Center vacías, el point guard pasó horas lanzando una y otra vez a canasta. El partido empezó a las ocho de la tarde en Toronto y el All Star seguía tirando solo pasada la una de la madrugada. Mucho que pensar; mucho que mejorar.

"Estoy intentando recuperar la chispa. No sé dónde está", dijo Lowry Tras el partido (ESPN). Sus compañeros están con él. "La única forma de salir de una mala racha es seguir tirando. Kyle es un jugador con mucha confianza, por eso es All Star", añadió Patrick Patterson.

Los Raptors van a necesitar la mejor versión del base para tener opciones ante los Heat.