Velimir Perasovic dijo al final del choque del pasado viernes que su equipo no podía volver a dar la imagen que había dado y hoy sus hombres lo han dado todo en la pista y han estado a punto de equilibrar la eliminatoria, mejorando en todos los aspectos.

La decisión del técnico croata de colocar dos bases en juego le ha dado un gran resultado, ya que Adams y Mike James han sumado 26 puntos entre ambos y han marcado el ritmo de juego durante muchos minutos. Además, Kim Tillie e Iannis Bourousis han logrado equilibrar el rendimiento en el juego interior y el rebote (35 capturas para el Barcelona y 34 para el Baskonia).

Los dos equipos eran conscientes de la importancia de este segundo partido y no se han dado un momento de respiro. Para Xavi Pascual el poder disputar el quinto partido en el Palau, si fuese necesario, era vital en una serie que se presenta larga, a pesar de la superioridad barcelonista en estos dos primeros encuentros. En este segundo ha sido el bloque barcelonista el que ha evitado una derrota que podía complicarle las cosas

El Barcelona no ha estado cómodo en la pista con la defensa alternativa zona-hombre de Perasovic, sus jugadores se han estrellado, el viernes fue el Laboral Kutxa, desde la línea de 6,75 (5 de 23 en triples) mientras que los visitantes, en un tercer cuarto espectacular (5 de 8 en triples) ha endosado a los catalanes un parcial de 0-15, pasando de 44-36, (m.23) a 44-51 (m.27), merced a cuatro triples de Adams (2) y Tillie (2).

Parecía que el Barcelona estaba tocado, pero lograba recortar la final de este fatídico tercer cuarto (52-56), pero Xavi Pascual confió en Stratos Perperoglou para romper la efectividad de Bourousis en la zona azulgrana.

El alero griego devolvía la iniciativa a su equipo (63-60, m.36) y Perasovic pedía tiempo, retornando a Bourousis a pista. Ahí se producía una jugada clave, con 65-62 (m.36) ya que Adams erraba en un mate increíble en solitario y en la siguiente jugada anotaba Tomic (67-62). Perasovic sentaba al base estadounidense y ese golpe lo iba a notar en exceso, especialmente al final del choque.

A Perperoglou no le falló el pulso y un triple suyo, para su noveno punto en ese cuarto abría un brecha inalcanzable (70-64, m.38) para un rival desgastado físicamente y donde ya sólo Mike James, tras un partido extraordinario, inquietaba.

Adams volvía a pista por el Laboral Kutxa en el último minuto, pero fallaba en los triples y Satoransky, que había entrado por Pau Ribas, que actuó de base varios minutos, sentenciaba la contienda anotando de manera consecutiva dos de cuatro tiros libres (73-68).