El Real Madrid demostró el viernes que no se va a dejar amedrentar por los precedentes. Esos que dicen que el Barça siempre gana la final cuando tiene ventaja de campo y se pone 1-0 de inicio. Y no son nada desdeñables: un 39 de 39 inmaculado. Casi nada. Pero el equipo de Pablo Laso parece obsesionado en cambiar la historia y la paliza en el Palau es buena prueba de ese deseo. La victoria por 70-90 es la más amplia (+20) del Real en cancha blaugrana en la era ACB (a partir de 1983). La última vez que el conjunto blanco superó los 15 puntos de diferencia en Barcelona fue durante la temporada regular de 1997-98. En esa ocasión, el Madrid destrozó a los culés por 18 tantos (73-91), con un inmenso Bodiroga (22 puntos). Los de Laso han ganado a domicilio por 20 o más tantos en cuatro ocasiones este curso.

Además, es el tercer triunfo más holgado en una final de la Liga Endesa. Las dos mayores distancias en el marcador fueron en la campaña 1984-85 con el Joventut y el propio Real Madrid como protagonistas. En el primer partido por el título, la Penya ganó por 86-111 (+25); mientras que en el segundo, los blancos, campeones a la postre, devolvieron el golpe al vencer por 76-97 (+21).

Navarro es duda para el tercero

Juan Carlos Navarro es duda para el tercer partido de la final por un esguince de tobillo. El escolta se retiró de la cancha cuando restaban algo más de seis minutos para el final del segundo encuentro. “Hay que esperar su evolución”, comentó Pascual, entrenador del Barcelona.