LeBron James ha recibido muchos palos durante su carrera. Las críticas a su labor fuera y dentro de la cancha (algunas lógicas; otras, una simple locura), se han ido acumulando en el tiempo, creciendo de forma exponencial con cada uno de sus fracasos deportivos y durante todas estas Finales de la NBA, frente a Golden State Warriors, sus haters oficiales esperaban con las horcas afiladas a un nuevo tropiezo en su carrera... pero fallaron. Y ahora, el alero de Cleveland Cavaliers ha sacado todo su orgullo herido durante años y, a través de la red social Instagram, mandó un mensaje a todos aquellos que le habían subestimado.

"Dijeron que habías perdido tu nivel, que no eras tan explosivo como antes, que los mejores días quedaron atrás, cuestionaron tu motivación, tu liderazgo, tu compromiso, que no tenías instinto asesino, que regresar a casa era el peor error de tu carrera, que despediste a tu entrenador, traspasaste jugadores, que no funcionaba con Kyrie (Irving), que no trabajabas con Kevin (Love), no querías mucho a tus compañeros que no podías traer un campeonato a tu casa, etc, etc…pero sabes qué…¡NADA DE ESO ME IMPORTA! Hahahahaha!!!! Sí, señor".