Dos de los colosos de la próxima Euroliga se midieron en un duelo que resultó algo así como catar un melón fuera de temporada. Prometía más por fuera, aunque el regusto final tiró a dulce con ese 17-0 que maquilló (87-90) el amago de paliza del Fenerbahçe (60-83 vencía el equipo turco ante un Madrid que debutaba en la pretemporada).

Faltaron muchas cosas, sobre todo en un Real más retrasado en la puesta a punto, pero se atisbaron otras. A los blancos les faltó fluidez y acierto, también coordinación y concentración defensiva en una fase del curso donde la preparación física manda. Piernas cargadas que encapotaron el talento, no todo porque ahí estaban Luka Doncic y Anthony Randolph, y acentuaron los fallos en el ensamblaje colectivo.

Los de Laso, además, jugaron por primera vez en muchos, muchos años sin ninguno de los dos Sergios. Sin el Chacho, que ha volado a la NBA, y sin Llull, reservado para la Supercopa (viernes 23 ante el Barça) con alguna molestia física tras el bronce olímpico. Rudy y Reyes sí saltaron a pista, pero solo durante la primera parte. Y Maciulis y Othello Hunter (uno de los cuatro nuevos: Álex Suárez no se vistió) tuvieron serios problemas con las faltas personales. Doncic exhibió sus nuevos galones de base, por si quedaban dudas, aunque de salida le faltó tacto en las entradas y solidez defensiva, como a todo el bloque.

El que iluminó la escena en la primera parte fue Anthony Randolph con fogonazos de clase. Subió el balón en contraataque como un base de 2,11 (réstenle algún centímetro sin zapatillas), martilleó desde la esquina y puso en aprietos en el uno contra uno a Vesely. Fogonazos, decimos, porque en la balanza que comparaba equipos, el Fenerbahçe batió con amplitud al Madrid.

Primero apareció el serbio Bogdan Bogdanovic con 12 puntos de carrerilla y luego lo hizo un Bobby Dixon encendido que destrozó desde la larga distancia. No faltó tampoco la presencia demoledora de Vesely, sobre todo, y también de Udoh. El Madrid cambiaba en defensa de emparejamientos continuamente y siempre había un desajuste bien leído por los de Obradovic (25 asistencias frente a 16). Pretemporada, sí; apenas un simulacro de batalla, pero el verdugo de los blancos en la última Euroliga volvió a cantar victoria. Muy rodado y con menos internacionales este verano que su rival.

Hasta el descanso los asaltos eran parejos (45-47), pero Dixon (22 tantos y 5 de 7 de tres) dinamitó la pelea en el tercer cuarto y la renta tocó los 23 puntos: 60-83. El Madrid de las remontadas apareció entonces (70-90) para firmar un maquillaje explosivo: 17-0 de parcial con triplazo final de Doncic y antes, tres consecutivos de Nocioni. Doncic terminó con 19 puntos, 6 rebotes, 4 asistencias y 22 de valoración. Randolph hizo 12 tantos y 17 de valoración. El Fenerbahçe se lleva ya el trofeo Costa del Sol a Estambul y el Madrid y el Unicaja se disputan este sábado el segundo puesto (20:00, RM TV). Habrá que verlo.