KNICKS 105 - PISTONS 102

Los Knicks ganan al ritmo de Porzingis: 35 puntos de estrella

El joven letón acabó con la mejor marca de su carrera y escuchó gritos de "MVP, MVP!" antes del susto final de los Pistons.

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Sin infarto no hay victoria en Nueva York. Así son los actuales Knicks. Pero el espectáculo al que asistieron ayer las casi 20.000 personas que llenaban las gradas del Madison Square Garden vale cada segundo de respiración entrecortada que provoca este equipo. Un paso más de Kristaps Porzingis. Uno más en una carrera de la que apenas conocemos el inicial camino de piedras que el siete pies ha convertido en lanzadera con la mejor de las sonrisas. Uno más hacia el cielo, que es el único límite que parece tener este letón de 21 años y un físico kilométrico.

Admito que no soy objetivo, pero... ¿han visto jugar a este chico? Lo tiene absolutamente todo para ser una gran estrella de la NBA. De hecho, ayer lo fue, y eso que, como bien dice su compañero Derrick Rose, "sale ahí y anota 30 sin saber todavía lo que es realmente la NBA". Porque tiene la facilidad insultante de los mejores y la chispa que diferencia a quien es especial. Mueve su infinidad de centímetros a una velocidad injusta para sus pares y muchas veces se pasa porque tiene 21 años. Comete faltas tontas, aún no ha aprendido a coger la posición en el poste y toma decisiones apresuradas que terminan en fallos impropios de un jugador de su talento. Sí, todo porque tiene 21 años.

Pone el balón en el suelo, se gira y te mata desde cualquier ángulo y a cualquier distancia de la canasta. Tira con precisión desde ocho metros sin esfuerzo y bate a grandes y pequeños, compañeros y rivales, corriendo de un lado al otro de la cancha para colgarse del aro. Se pega un golpe tremendo, pero se levanta y le dedica una mirada a Jennings tras la que no sabes si reírte o simplemente aplaudir. Como digo, lo tiene todo.

Más allá del mejor partido de la corta carrera de Porzingis, el primero de muchos de más de 30 puntos ante un Madison totalmente entregado, los Knicks sufrieron y sufrieron mucho. Caldwell-Pope (21) e Ish Smith (14+8) redujeron distancias y, tras un fallo de Rose desde el tiro libre, el primero tuvo un buen triple para mandar el partido a la prórroga sobre la bocina. Falló.

Segundo triunfo consecutivo de los Knicks (5-6), 22 puntos de Carmelo Anthony, 15 asistencias del quinteto titular (tres de cada uno de los miembros) y siete de un Brandon Jennings que se quedó sin anotar. Esta noche, contra los desastrosos Wizards (2-8), los de Hornacek intentarán recuperar el 50% de victorias que aún conservan los Pistons (6-6).